“No me olvido de lo que hice… solamente quiero salir para estar con mis hijos y mis nietos”, le dijo Susana Freydoz al juez que autorizó el lunes sus salidas transitorias desde el lugar donde cumple prisión domiciliaria, por el asesinato de su marido, el exgobernador de Río Negro, Carlos Soria.
La intervención de la mujer, condenada a 18 años de prisión por el hecho ocurrido el 1 de enero del 2012, aparece detallada en la sentencia del Juzgado de Ejecución Penal de Roca, donde también se destaca su pedido para que su caso se resuelva “con perspectiva de género”.
Freydoz entendió que eso “que tanto estamos pregonando” no se estaba cumpliendo, porque desde el Ministerio Público Fiscal se avanzaba con un régimen de progresividad, cuando ella y su defensa pretendían que se autorice directamente la libertad condicional.
El acceso a ese beneficio lo tiene permitido desde el 27 de septiembre pasado, tras haber cumplido dos tercios de la pena impuesta hace diez años, pero el magistrado que intervino, Fernando Romera, se mantuvo dentro de los parámetros establecidos en otros casos, pasando de la prisión a las salidas transitorias y recién más tarde a la libertad condicional.
El camino diagramado por el juez de Ejecución prevé dos salidas mensuales -una de 24 horas y otra de 48 horas- durante noviembre, diciembre, enero y febrero próximos. Por la fecha en la que se realizó la audiencia, es altamente probable que esa primera salida se haya cumplido ayer o que se realice hoy.
Freydoz tiene permitido viajar hacia Roca desde Neuquén, donde cumple con prisión domiciliaria desde enero del 2020 en la casa de una familiar. Los traslados no pueden durar más de cuatro horas en total, entre ida y vuelta.
Los tutores designados para esas salidas son su hija e intendenta de Roca, María Emilia Soria, y su esposo, Mariano Valentín.
La sentencia detalla que Freydoz se vio “sorprendida” por los planteos de la fiscal adjunta de Ejecución Penal subrogante, Susana Carrasco, quien pidió que se cumpla con el régimen de progresividad.
Fue allí cuando recordó que tiene 72 años y que “con este beneficio no se olvida de lo que hizo” y que “solamente quiere salir para poder estar con sus hijos y nietos”.