Este 17 de octubre ofrece claridad. Lejos de presentar una foto de unidad del peronismo supuestamente contenido bajo el paraguas del Frente de Todos fragmentado, se festejará en tres actos distintos.
Por un lado, el triunvirato que conduce la CGT, con Hector Daer y Carlos Acuña a la cabeza, anunciaron un acto en Obras Sanitarias donde incluso lanzarán una frente político denominado Movimiento Nacional Sindical Peronista.
“Los gordos de la CGT junto a Héctor Daer y Carlos Acuña, que además de ser cosecretarios son ex diputado por el Frente Renovador el primero y miembro de la mesa de conducción de ese partido el segundo, van a Obras a lanzar su propia corriente política para las listas del 23”, afirmó una fuente del entorno de Sergio Massa.
“La CGT quiere su parte o su sello para disputar por afuera. Todos se atrincheran por si no hay PASO”, agregó la fuente consultada.
Por su parte la CTA, la Corriente Federal que es parte de la CGT, el moyanismo, el PJ con los intendentes bonaerenses y La Cámpora convocan a Plaza de Mayo. Integran el sector que lidera Cristina. Se espera un discurso de Máximo Kirchner. “Va a ser de barricada”, adelantaron desde su espacio.
“El kirchnerismo ve la plaza como la posibilidad de empezar a pulsear por la recuperación o reinvención, dado que hasta ahora no funcionó bien el Frente de Todos como herramienta política”, dijo una fuente del entorno de Yasky.
El tercer acto relevante es el que convoca el Movimiento Evita, que conducen Emilio Persico y Fernando “Chino” Navarro, que va a La Matanza. Acá tampoco escapan las referencias electorales ya que la pareja de Pérsico, Patricia Cubría, quiere ser candidata a intendenta en 2023. Un desafío directo al actual intendente kirchnerista Fernando Espinoza.
“Por afinidad y respaldo, esta convocatoria es la que mas cómoda resulta a Alberto pero le queda chico como Presidente de la Nación y presidente del Partido Justicialista”, afirmaron desde el Movimiento Evita, para explicar su ausencia. Es lógico sería extraño que el Presidente no vaya al acto en la plaza ubicada frente a la sede en la que gobierna.
Desde el entorno del presidente reconocieron que “es verdad que Alberto no va a ninguno de los actos” pero aclararon que “saluda la realización de todos”.
En el kirchnerismo afirman que “la lectura es que Alberto está solo, acompañado nada más que por Cerruti, Cafiero y dos más y juega a hacer daño o maniobra para no quedarse como pato rengo para terminar bien su mandato. Salir airoso y reírse de los que vengan después a hacer las cosas peor. Nadie cree seriamente que sea candidato”, evaluó ante una fuente de La Cámpora.