
Antes de convertirse en reina de España, Letizia Ortiz estuvo casada con Alonso Guerrero Pérez, un escritor y profesor de literatura con quien contrajo matrimonio en 1998. Aunque su historia juntos es conocida, poco se ha hablado sobre la vida que ha llevado Guerrero tras su divorcio de la actual monarca.
El romance entre ambos comenzó en 1988, cuando Letizia era una estudiante de 16 años en el colegio Ramiro de Maeztu, y Guerrero, una década mayor que ella, ejercía como profesor de Literatura. Con el tiempo, la relación evolucionó y culminó en una boda civil el 7 de agosto de 1998 en Almendralejo, localidad natal de Guerrero. Sin embargo, el matrimonio fue breve y apenas un año después decidieron separar sus caminos.
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Tras el divorcio, Guerrero continuó con su carrera literaria, aunque su trayectoria se ha desarrollado en gran medida bajo la sombra de su expareja. Las mujeres felices son una quimera, su última novela publicada en 2023, generó especulaciones debido a su título, que algunos interpretaron como una referencia a la reina Letizia. No obstante, el autor ha negado que su obra tenga relación con su vida personal, según informó Vanidades.
Siguió con su carrera literaria y docente
Guerrero mantuvo un perfil discreto mientras su expareja ascendía en la esfera pública. Residiendo en Guadalajara, compartió su vida durante varios años con María del Carmen Astero Marín, también profesora, de quien se acabó separando. Según informaciones de El Mundo, tras su divorcio con Letizia, se refugió en su piso de dos plantas en el centro de la ciudad, intentando mantener su rutina, alejado del foco mediático.
En el ámbito académico, el escritor retomó la docencia y volvió a dar clases en el mismo centro donde conoció a Letizia. Posteriormente, en 2016, solicitó su traslado al instituto Beatriz Galindo de Madrid, donde continuaría ejerciendo su profesión. Sus alumnos y colegas destacan su perfil reservado y su dedicación a la enseñanza, alejado de cualquier tipo de notoriedad.
A lo largo de los años, su nombre ha seguido apareciendo en los medios, especialmente en aquellos críticos con la monarquía, que habrían llegado a insinuar que la Casa Real impidió su acercamiento y que incluso pudo haber recibido presiones para guardar silencio. Sin embargo, en una entrevista con El Mundo, el propio Guerrero desmintió estas afirmaciones, asegurando que su relación con la Corona es cordial y que nunca ha recibido ofertas económicas por mantener el silencio.
En cuanto a su carrera literaria, Guerrero ha publicado varias novelas, aunque su faceta de escritor ha sido eclipsada por su vínculo con Letizia. Una de sus obras más destacadas, Un día sin comienzo, aborda los atentados del 11-M, pero a menudo sus trabajos han sido mencionados más en relación con su pasado personal que por sus méritos literarios. Además, fue galardonado con el I Premio Internacional de Novela Jurídica, concedido por el Colegio de Abogados de Granada en 2022, lo que supuso un reconocimiento a su trayectoria.
Pese a la expectación inicial tras el compromiso de Letizia con Felipe de Borbón, el escritor ha logrado mantener una vida sin sobresaltos. Se sabe que sigue empadronado en el mismo domicilio donde se le ubicó en 2003 y que suele pasar temporadas en Almendralejo, si ciudad natal, donde mantiene vínculos personales y familiares. Algunos vecinos aseguran que, con el tiempo, la notoriedad en torno a su figura ha disminuido y que ahora “lleva una vida normal, ya nadie le reconoce por ser el ex de la Reina”.