Prince, el genio que deslumbró al mundo y murió solo en un ascensor

Desde niño, Prince sintió que su nombre no le pertenecía. Lo habían llamado así en honor a su padre, el pianista John L. Nelson, pero él odiaba ese nombre. No se sentía un príncipe. “Llámenme Skipper”, pedía con insistencia.

Pero ni su apodo ni su entorno le daban refugio. Su hogar era un campo de batalla. Su padre tocaba el piano y componía, su madre, Mattie Della, era cantante de jazz. Pero la música no los unía, los separaba.

Según New York Times, el niño crecía entre gritos, discusiones y silencios tensos. A los diez años, su familia se rompió: sus padres se divorciaron. Primero se quedó con su madre, luego se fue a vivir con su padre. Pero este último lo echó de casa.Desde su infancia turbulenta, PrinceDesde su infancia turbulenta, Prince encontró en la música su mayor refugio y propósito (Wikipedia)

Prince no tenía un hogar fijo, dormía en casas de vecinos, en la de los Anderson, donde su amigo André se convirtió en su hermano.

Según All That´s Interesting,nada lo ataba a un lugar, salvo la música. Desde pequeño, tocaba el piano de su padre a escondidas, componía canciones antes de aprender a leer correctamente. A los siete años creó su primer tema, “Funk Machine”.

A los diez, cuando su padrastro lo llevó a ver a James Brown en concierto, supo que su destino estaba escrito. “Quiero hacer eso”, dijo, con la certeza de quien ha encontrado su misión en el mundo.

Con su amigo André, formó la banda Grand Central en la adolescencia. Pasaban horas encerrados en sótanos y garajes, puliendo un sonido que nadie más tenía. Prince era pequeño de estatura, pero en el escenario crecía, se expandía, hipnotizaba.Su pelea contra la industriaSu pelea contra la industria lo convirtió en símbolo de libertad creativa y control artístico (Wikipedia)

Él hacía todo: tocaba la guitarra, el piano, componía, cantaba. No confiaba en nadie más que en su propio talento.

En 1976 grabó un demo, y su música llegó a los oídos de la gente correcta. Con 18 años, firmó su primer contrato con Warner Bros. No solo tenía un contrato, tenía control. El sello le dio total libertad artística.

Un debut así era casi imposible en la industria, pero Prince no era como nadie más. En 1978 lanzó su primer disco, “For You”, tocando todos los instrumentos. Lo hacía todo él solo. Era una máquina imparable.

A partir de ahí, fue ascenso tras ascenso. En 1982, con el álbum “1999”, Prince explotó en la escena mundial. “Little Red Corvette” y “1999” sonaban en todas partes. Pero su verdadero golpe a la historia llegó en 1984, con “Purple Rain”.

Purple Rain

0 seconds of 4 minutes, 33 secondsVolume 74%Purple Rain” convirtió a Prince en una superestrella y definió una era en la música (YouTube: ByLittleSubs)

No solo fue un disco: fue una película, una revolución. Por primera vez, un artista logró tener el álbum número uno, el single número uno y la película número uno en simultáneo en Estados Unidos.Durante 24 semanas, "Purple Rain"Durante 24 semanas, “Purple Rain” dominó las listas, haciendo historia en la industria

Durante 24 semanas, “Purple Rain” dominó las listas. Prince ya no era un músico, era un símbolo.

Y cuando el mundo creyó que ya había visto todo de él, Warner Bros. le ofreció un contrato récord en 1992: 100 millones de dólares, el más grande en la historia de la música hasta ese momento.Multiinstrumentista y visionario, Prince componía,Multiinstrumentista y visionario, Prince componía, producía y tocaba casi todos sus discos (Wikipedia)

Pero el trato tenía un precio alto: Prince no era dueño de sus propias grabaciones. Para él, fue una traición.

Se rebeló de la forma más radical: dejó de llamarse Prince. Inventó un símbolo impronunciable para reemplazar su nombre y obligó al mundo a encontrar una manera de referirse a él.Su enigmática personalidad y estiloSu enigmática personalidad y estilo extravagante lo hicieron inconfundible dentro y fuera del escenario (Wikipedia)

La prensa comenzó a llamarlo “El artista antes conocido como Prince”.

Se convirtió en un enigma, más recluso que nunca. Sus entrevistas eran escasas. No hablaba de su vida privada, no dejaba que nadie lo viera sin su máscara de estrella. Pero su carrera siguió: en 2004 fue incluido en el Rock & Roll Hall of Fame, en 2010 la revista Time lo nombró una de las 100 personas más influyentes del mundo.

Se presentó en los Grammy con Beyoncé, entregó álbum tras álbum, siempre desafiando lo establecido.En los Grammy 2004, PrinceEn los Grammy 2004, Prince y Beyoncé deslumbraron al mundo con una actuación icónica (Foto AP/Kevork Djansezian, archivo)

Pero mientras su imagen seguía intacta, su cuerpo empezaba a resquebrajarse.

El dolor era insoportable. Su cadera, su espalda, sus rodillas: todo dolía. Y Prince no podía detenerse. No podía dejar de tocar. No podía dejar de ser Prince.

El 14 de abril de 2016, se presentó en Atlanta. Un día antes, había cancelado el show por problemas de salud. Pero volvió a subirse al escenario. Era su última actuación en vivo.Su enigmática personalidad y estiloSu enigmática personalidad y estilo extravagante lo hicieron inconfundible dentro y fuera del escenario (AP Photo/Kevork Djansezian, File)

Un día después, el 15 de abril, subió a su jet privado para volver a casa. Pero nunca llegó a Minneapolis. En pleno vuelo, se desplomó.

Su equipo entró en pánico. El avión aterrizó de emergencia en Moline, Illinois. Cuando los paramédicos entraron, lo encontraron inconsciente.

Según New York Times, le administraron Narcan, un antídoto para sobredosis de opioides. Prince despertó. Cuando le preguntaron qué había tomado, dijo que tenía gripe.

Lo llevaron al hospital, pero se negó a hacerse análisis de sangre. Se fue en cuanto pudo, tomó otro avión y regresó a Minnesota.

El 20 de abril, un día antes de su muerte, fue visto entrando a la consulta de su médico, Michael Schulenberg. Vestía de negro, parecía más delgado que nunca.Un día antes de suUn día antes de su muerte, Prince visitó a su médico buscando alivio para su dolor (AP)

Su guardaespaldas y amigo, Kirk Johnson, lo acompañaba. Según ABC News, días antes, desde el teléfono de Johnson, había salido un mensaje: “Prince pide líquidos. ¿Puedes llamarme?”. Schulenberg le recetó un medicamento para tratar la abstinencia de opioides.

Esa noche, Prince volvió a Paisley Park. Estaba solo.

A la mañana siguiente, 21 de abril de 2016, su personal se preocupó al no verlo. A las 9:43 AM, un empleado lo encontró tirado en el ascensor de su casa-estudio. No respiraba. Estaba frío.Prince fue encontrado sin vidaPrince fue encontrado sin vida en un ascensor de Paisley Park el 21 de abril de 2016 (The Washington Post/AP Photo/Liu Heung Shing)

El Carver County Sheriff’s Office confirmó la muerte. Tenía 57 años. Los paramédicos lo declararon muerto a las 10:07 AM. No había signos de violencia. Solo un cuerpo agotado.

Cuando la policía registró Paisley Park, encontró pastillas en todas partes. Algunas dentro de frascos con etiquetas falsas.

Prince había estado tomando lo que creía que era Vicodin, un analgésico fuerte. Pero no era Vicodin. Las píldoras estaban mezcladas con fentanilo, un opioide 50 veces más potente que la heroína.

Prince nunca supo lo que estaba tomando.

La autopsia confirmó: sobredosis accidental de fentanilo. Según Usa Today, la investigación no encontró culpables. Nadie sabía quién le había dado las pastillas.

Nadie fue arrestado. Solo quedaba un hombre muerto en un ascensor y un mundo que lloraba su partida

Paisley Park se convirtió en un mausoleo. Sus fanáticos llenaron de flores la entradaLas radios del mundo entero comenzaron a sonar con “Purple Rain”.

Francisco González Tomadin.

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