![Karla Sofía Gascón cambia la dinámica de los Oscar. (Europa Press / The Academy)](https://www.infobae.com/resizer/v2/V6IKBL27TVBIJHRVCCBE6MBKRA.jpg?auth=f9f9c264bef75232cb94417d8e3606625d19463795f9c2872449b0a269dad78e&smart=true&width=1920&height=1080)
La controversia generada por la reaparición de antiguos tuits racistas de Karla Sofía Gascón ha sacudido la carrera de Emilia Pérez, una de las favoritas en la 97ª edición de los premios de la Academia de Hollywood. Netflix ha apartado a Gascón de los actos vinculados a la película y a los premios previos a los Oscar en los que está nominada como mejor actriz protagonista, y en España también se notan las consecuencias: no acudirá a la entrega de los Goya que tendrán lugar este sábado en Granada. La presión de la industria y del público ha llevado a numerosos usuarios en redes a exigir que la Academia retire su nominación antes de que comiencen las votaciones el próximo 11 de febrero.
Ante la polémica que se vive en la Academia de Hollywood, ya se han tomado algunas decisiones que afectan a Gascón de manera directa. Este jueves se ha conocido que han eliminado el formato Fab 5 en las categorías de interpretación, lo que afectaría directamente la presentación de la candidatura de Gascón. . En este formato, antiguos ganadores de la categoría suben al escenario para homenajear a los nominados, algo que este año no ocurrirá.
Sin embargo, la pregunta sigue en el aire: ¿puede la Academia retirar una nominación por su comportamiento? Históricamente, las descalificaciones han respondido a infracciones de reglamento, sin relación con la conducta de los nominados.
Nominaciones anuladas
El primer caso registrado de una nominación retirada no se debió a una sanción, sino a una decisión especial de la Academia en 1929, en su primera edición. Charles Chaplin había sido nominado cuatro categorías por El circo (1928): mejor actor, mejor guionista, mejor director de comedia y Película destacada. Tras creer o temer que Chaplin arrasaría en las cuatro categorías, la Academia revocó sus nominaciones individuales y en su lugar le otorgó un premio honorífico especial “por escribir, actuar, dirigir y producir El circo”.
En 1954, la categoría de mejor argumento perdió una de sus nominaciones cuando se descubrió que Hondo (1953), de John Farrow, no era una obra original. Por esta razón, el guionista James Edward Grant perdió su nominación. Aparentemente, el guion estaba basado en un cuento llamado The Gift of Cochise y, por lo tanto, no podía considerarse en la categoría de Mejor historia, como se denominó a la primera versión de los Oscar de Mejor guion.
Dos años después, la comedia musical Alta sociedad (1956) se coló por error en la categoría de mejor guion original, a pesar de ser un remake de Historias de Filadelfia (1940). Para mayor confusión, la nominación se otorgó a los guionistas de otra película del mismo título estrenada en 1955. Al descubrirse la equivocación, la nominación fue eliminada.
Uno de los casos más sonados ocurrió en 1973 con El padrino (1972). La icónica banda sonora de Nino Rota fue descalificada al descubrirse que parte de la música había sido reutilizada de Fortunella (1958). Rota se resarciría dos años después ganando el Oscar por El padrino: Parte II.
A diferencia de las nominaciones retiradas, solo una película ha perdido un Oscar después de haberlo ganado. En 1969, Young Americans (1967) obtuvo la estatuilla a mejor documental, pero al confirmarse que se había estrenado dos años antes, se le revocó el premio.
Hasta ahora, la Academia no ha descalificado a ningún nominado por motivos ajenos a la reglamentación del certamen. Queda por ver si la controversia en torno a Karla Sofía Gascón generará un precedente inédito en la historia de los Oscar.