Este lunes le realizaron una prueba de ADN a la hija del exmarino Carlos Guido Pérez, uno de los detenidos en el caso de la desaparición de Loan Danilo Peña en Corrientes el 13 de junio del 2024 mientras estaba en un almuerzo familiar. El hisopado se realizó en la provincia de Chaco para determinar si la menor es Sofía Herrera, la niña que desapareció en 2008 en un camping en Río Grande, Tierra del Fuego.

De acuerdo a lo que pudo saber LA NACION por parte de la defensa de la madre de Herrera, María Elena Delgado, el Juzgado de Instrucción N°1 de la ciudad Río Grande -a cargo de María Rosa Santana- ordenó realizar un hisopado bucal a la menor que vive en Chaco debido al parecido con la niña desaparecida. Además, la decisión judicial fue en base a la declaración de una testigo que declaró haber visto al exmarino Pérez cerca del camping fueguino donde desapareció Herrera en 2008.

Así fue el procedimiento para extraer el ADN de la hija de Carlos Pérez.

El procedimiento tuvo lugar a las 8 de este lunes en una vivienda del barrio Villa Itatí, en Resistencia, mediante un hisopado de saliva. Esta orden se da en el marco de una investigación de oficio de la Policía de Chaco que comenzó en junio del año pasado, con intervención de la Fiscalía de Investigación Penal N°6, a cargo de Roberto Villalba. “También se trasladó personal de Policía científica de Tierra del Fuego para estar presente al momento de la extracción y traslado de las muestras”, indicó Francisco Ibarra, el abogado de Delgado, a este diario.

María Elena Delgado

En paralelo, se allanó la casa donde vive la menor. Su padre es uno de los siete detenidos por la desaparición de Loan Peña en la localidad de 9 de Julio, todos procesados con prisión preventiva. Su esposa, María Victoria Caillava, también es una de las apuntadas por la Justicia por el caso del menor de cinco años; ella era funcionaria del pueblo. El matrimonio fue capturado tras ser implicados en la carátula de “trata de personas”.

El parecido de la hija de Pérez -que tendría 14 años- con Sofía Herrera -que hoy tendía 19- salió a la luz a raíz de una entrevista que se le hizo a la madre de la menor que reside en Chaco, mientras negaba la implicación de su exmarido en el caso. La investigación conducía hacia esa provincia luego de que se determinara que tras la desaparición de Loan, Pérez y Caillava viajaron con su auto hacia Resistencia. Si bien parecía que en aquel entonces se había descartado que fuera Herrera, el fiscal de Río Grande Ariel Pinno pidió realizar la prueba el diciembre pasado. Todo esto a pesar de que la Justicia accedió a la partida de nacimiento de la menor, que indica que tiene 14 años y que nació en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca.

“La mujer (por la madre de Brisa) dice que tiene 14 años. Si tiene esa edad no podría ser nunca mi hija. Me llenaron de mensajes con la foto de la hija de Pérez y yo la vi a la chiquita, pero no la encuentro muy parecida a mi hija Sofía“, dijo Delgado el año pasado en una entrevista radial.

“Hoy espero con cuidado. Tal vez porque también tantas veces no fue”, se limitó a decir este martes Delgado en diálogo con LA NACION a la espera de los resultados del ADN, que se conocerán en 30 días.

La desaparición de Sofía Herrera

El 28 de septiembre de 2008, Delgado y su marido Fabián Herrera se encontraban junto a su hija de tres años en el camping John Goodall, ubicado en el kilómetro 2893 de la Ruta Nacional 3, cercano a la localidad de Río Grande, donde residían. Pasadas las 11.30, Sofía -de tres años en ese entonces-, se separó por unos instantes de sus padres y ahí fue cuando desapareció.

El escenario del hecho fue un paraje casi desértico de 15 hectáreas, cercado con un alambre de un metro de altura y seis hilos que se investigó al instante. Los efectivos de la Policía y los perros especializados en búsqueda y rastrillaje marcaron un sector cercano, pero la pista se perdía unos metros más lejos. Las hipótesis fueron varias: desde que la pequeña cayó a un arroyo a que se la llevó un cóndor o un águila. Con el paso de los días, se añadió la posibilidad de que fuera secuestrada, versión que su madre sostiene desde entonces.

Sofía Herrera.

Tras varios peritajes, reconstrucciones de los hechos, interrogatorios a los testigos, la colaboración de agentes del FBI, una recompensa de un millón de pesos otorgada por el Ministerio de Seguridad para el aporte de datos útiles sobre la desaparición y un retrato hecho por un robot que se actualiza con el paso de los años, aún no hubo éxito para encontrar a la niña que sigue desaparecida.