Luego de que se conociera el dato de inflación mayorista de enero, el presidente Javier Milei celebró que Argentina atravesaba un proceso de deflación en dólares.
La inflación mayorista de enero se aceleró respecto de la de diciembre y anotó un 1,5% mensual, contra el 0,8% del mes anterior. Además, alcanzó su mayor nivel en cuatro meses.
DEFLACIÓN EN DÓLARES Otro mes más en el que la inflación mayorista estuvo debajo del crawling peg del 2% (ahora en 1%). Si a ello se le suma la inflación de los EEUU la deflación es aún mayor.GRACIAS @LuisCaputoAR por ser el mejor ministro de economía de la historia.VLLC! https://t.co/rWCeoQRL0L
— Javier Milei (@JMilei) February 19, 2025
Según analizó LCG, la aceleración se dio tanto en los productos nacionales (1,6%, 0,6 puntos más que en el mes anterior) como en los importados (0,5%), que subieron después de 4 meses de caída.
Al conocerse el dato, el presidente dijo en sus redes sociales: “Deflación en dólares. Otro mes más en el que la inflación mayorista estuvo debajo del crawling peg del 2% (ahora en 1%). Si a ello se le suma la inflación de los EEUU la deflación es aún mayor”.
El presidente ratificó sus dichos en su exposición en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Estados Unidos: “Todos los números vienen mostrando deflación en dólares, dado que el crawling peg estaba al 2%”.
Fuentes consultadas que eligieron mantener el off explicaron que el presidente se refiere a que la inflación mayorista, en comparación con la variación del precio del dólar mayorista (2,2%) arroja que habría “deflación en dólares”.
Para esto, uno de ellos explica: “Una forma simple de pensarlo es, vos tenés un dólar que un mes después por ese mismo billete te dan un 2,2% más de pesos, pero los precios aumentaron 1,5%, por lo que con tus dólares podés comprar una mayor cantidad de bienes”.
Sin embargo, subrayaron que el argumento parece muy forzado porque el dólar es un precio más de la economía, y porque no todos los bienes reaccionan de la misma manera antes las variaciones del dólar oficial.
Otra dimensión que agregó Rocío Bisang, de Eco Go, es que la medición de la inflación es un promedio ponderado de los precios, donde algunos bienes suben más y otros menos. La variación final no implicaría una deflación generalizada.
Bisang agregó que el dólar está sujeto a variaciones y subrayó que la dinámica en cuestión es la de apreciación o depreciación del peso. “En esta situación en particular se puede pensar en una leve corrección del atraso cambiario. De todas maneras, tendría en cuenta que esto solo aplica a los bienes”.
El Gobierno atravesó en las últimas semanas una discusión sobre el atraso cambiario, en la que negó cualquier posibilidad de ese escenario y el propio Milei agregó que el dólar incluso podría llegar a valer $600.
En paralelo, se conocieron datos sobre el encarecimiento de Argentina medido en dólares. Un relevamiento de El País indicó que Argentina tiene el segundo salario mínimo más bajo (medido en dólares) de la región, mientras que es el más caro en café, una hora de estacionamiento, un litro de leche, una lata de gaseosa y un menú ejecutivo.
El Gobierno, además, busca empujar a la baja la inflación de los bienes con el crawling peg mientras que encabeza un proceso de cambio en los precios relativos.
Este proceso, agregó Bisang, suele ser dinámico y tener reajustes en el medio. Algo de esto se refleja en la inflación de los servicios, que se mantiene por encima de la de los bienes.