
Científicos de la NASA encontraron un nuevo planeta que se encuentra en la zona habitable del sistema Solar y que está a solo 4 años luz de la Tierra. Al estar tan cerca, podría facilitar el estudio de este cuerpo, algo que revolucionó a la ciencia.
El descubrimiento está ubicado en Alpha Centauri A, la tercera estrella más brillante del cielo nocturno. Justamente, es la primera vez en que se confirman planetas alrededor de esta zona, algo que representa un estudio que duró décadas.
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NASA: ¿puede albergar vida este planeta?
Mediante el instrumento MIRI del Telescopio Espacial James Webb de la NASA encontraron pruebas de la existencia de una planeta gigante gaseoso orbitando una estrella en el sistema estelar más cerca de nuestro Sol.
Los resultados publicados en The Astrophysical Journal Letters indican que está en una zona habitable de una estrella parecida al Sol. No obstante, al ser un gigante gaseoso, los especialistas descartan que albergue vida tal como la conocemos.
A raíz de esto, Charles Beichman, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, declaró que “con este sistema tan cerca de nosotros, cualquier exoplaneta encontrado nos brindaría la mejor oportunidad para recopilar datos sobre sistemas planetarios distintos del nuestro”.
Sin embargo, remarcó que se trata de observaciones “increíblemente difíciles de realizar, incluso con el telescopio espacial más potente del mundo, debido a su gran brillo, cercanía y rápida movilidad por el cielo”.
¿Cómo fue el estudio para descubrir al nuevo planeta?
Para realizar este descubrimiento, el Instituto de Ciencia del Telescopio Espacial tuvo que crear una “secuencia de observación personalizada específicamente para este objetivo”, según contó Beichman.
A partir de un extenso modelado computacional, determinaron que la imagen del Webb sea un planeta y no solo un objeto de fondo, tal como una galaxia o un asteroide que pasaba por allí.
Todo comenzó en agosto de 2024, cuando utilizaron una máscara coronográfica en el MIRI. A pesar de las dificultades por el brillo de Alfa Centauri B, lograron aislar la luz y así revelaron un objeto 10.000 veces más débil que Alfa Centauri A.