La novela paraliza al país, literalmente. En épocas de entretenimiento a la carta, en las que no es necesario plantarse delante de un televisor a un horario determinado, todo el entramado de Wanda Nara, Mauro Icardi y la China Suárez se convirtió en tema nacional.

Ninguna persona escapa de este culebrón, que no está ficcionado ni escrito por un guionista, sino que brota de los comportamientos increíbles de los tres famosos. A cada minuto se añade un nuevo capítulo, un acción de alguno de los involucrados para sacudir todo.