El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, abrió este sábado un nuevo período de sesiones ordinarias en la Legislatura porteña. Estuvo acompañado por su número dos, Clara Muzzio, y el vicepresidente primero de la Legislatura, Matías López. En su discurso, destacó que su gestión tuvo “orden y austeridad”, y lanzó varios dardos al gobierno de Javier Milei.
Además, ponderó las administraciones de Pro en territorio capitalino, destacó su plan de movilidad y aprovechó para retomar el anuncio que hizo el viernes: la puesta en marcha de la licitación para la línea F de subte, la obra más ambiciosa que de momento lanzó su gestión. Al respecto, justificó por qué la anunció ahora, ante los dardos que le giraron de la oposición debido a que es año electoral.
En primer término, Macri agradeció a la Legislatura por la aprobación del presupuesto para 2025 “con equilibrio, sin déficit y con el menor nivel de endeudamiento de los últimos 12 años”. Entonces dijo que esto dará previsibilidad y transparencia a la Ciudad. “Hemos hecho un culto del equilibrio fiscal. No necesitamos que nos enseñen cómo hacerlo”, marcó, sobre una de las banderas que tiene Milei, la de evitar el déficit. “Tenemos en claro: se puede ser tan eficiente como eficaz cuando, en vez de querer eliminar el Estado, se gestiona con austeridad, prudencia y responsabilidad, cuidando los recursos y sin gastar más de lo que entra”, sentenció, como un llamado de atención a la Casa Rosada.
Dijo también Macri que su gobierno no frenó la obra pública, algo que sí ocurrió a nivel nacional, y destacó que ya están por terminar la parte del Plan Hidráulico pautada para 2027. En esto, recordó una histórica frase que pronunció su primo Mauricio Macri en campaña. “Cuando este plan empezó, Mauricio les prometió a los porteños que cuando se hicieran las obras no se iban a inundar. Y eso sucedió. El ‘¡no se inunda más!’ es una marca registrada de una gestión que hace transformaciones concretas”, dijo para ponderar el macrismo.
Fue en ese momento que retomó la llegada de la línea F. En ese sentido planteó que su idea es “seguir transformando la movilidad” para que los porteños puedan moverse más rápido y, al respecto de este tema, justificó por qué hizo ahora el anuncio, tras las críticas que le llegaron de la oposición, que le achacó que tenía intenciones electorales y que esta obra ya fue anunciada reiteradas veces pero nunca se ejecutó.
“¿Por qué ahora? Si hubiéramos querido especular con la línea F hubiéramos hecho el anuncio en campaña. Lejos de eso, en el debate, en reuniones con vecinos, varias veces dijimos que no podíamos hacer la línea F u otra, porque necesitábamos llegar al gobierno, planificar, verificar los planos, la ingeniería. Pero, sobre todo, porque el país no tenía la certeza de tomar endeudamiento para una obra tan relevante como la del subte”, alegó y contrastó, en este caso con un guiño a la Casa Rosada: “Hoy esa macro, esa confianza, esa posición más seria, ese equilibrio fiscal que se ha logrado, permite que la Ciudad, con recursos propios, encare una obra tan relevante como la línea F y el Trambús. No hay especulación, hay seriedad, como siempre. Nosotros cuando nos comprometemos con una obra, la terminamos y la cumplimos”.
En todo momento, el jefe de Gobierno destacó la capacidad de gestión de Pro, recordó inversiones que se hicieron tanto durante su llegada al Ejecutivo como en los años previos, y destacó los paquetes de leyes que enviaron a la Legislatura y salieron aprobados. “Probablemente haya muchas cosas para romper en el país, pero esta Ciudad hay que cuidarla y mejorarla”, comparó y, fuera de libreto, lanzó un dardo a los gobernadores que dicen que la Capital no tiene producción. “Uno de cada cinco pesos se producen acá, en esta Ciudad, que no es solo servicios. Por eso mismo, si a la Ciudad le va bien, sin dudas al país también”, enfatizó.
Mientras destacó la lucha contra el terrorismo y pidió por la liberación de los rehenes de Israel que todavía están en manos de Hamas, retomó con un halago a Milei por el “buen trabajo” que hizo en ordenar la macroeconomía y que “millones de argentinos acompañan con esperanza”. Planteó entonces que el crecimiento de esta forma se vislumbra “con más claridad”.
Asimismo, habló de la “autonomía” y la “agenda propia” de la Ciudad y ahí marcó otras diferencias con la gestión nacional, al ahondar sobre el reclamo por la coparticipación que está judicializado. “En diálogo y coordinación con el gobierno nacional recuperamos 2,95% de coparticipación que el kirchnerismo nos quitó de forma inconstitucional. Sigue firme nuestro reclamo ante la Corte Suprema por el 3,5% establecido en el Pacto Fiscal de 2017 y los casi US$6000 millones que la Nación le debe a los porteños desde septiembre de 2020″, desglosó sobre una deuda que todavía no está saldada, con conversaciones que todavía no avanzaron entre ambos distritos.
Pese a que destacó que recibieron las 31 líneas de colectivo, la creación del fuero laboral, Macri planteó, directo hacia Balcarce 50: “Aún así, necesitamos avanzar con la transferencia de las otras competencias judiciales en materia penal, civil y comercial. Este año es un buen momento para discutir lo que nos falta para que reconozcan la autonomía que nos corresponde. Por eso, les pregunto: ¿Queremos discutir si el Puerto o la Terminal de Retiro tienen que ser de la Ciudad o van a seguir siendo de Nación? ¿Vamos a dar la discusión por la ampliación de la Justicia Penal, o va a seguir siendo de jurisdicción nacional? Las sociedades comerciales o entidades civiles, ¿se van a poder inscribir en la Ciudad o seguimos dependiendo de la IGJ nacional, vieja y lenta? ¿Nos vamos a sentar en la mesa donde se define la política energética de la Ciudad? ¿Qué legisladores nos van a acompañar en el reclamo por la deuda de la coparticipación? Esta es una larga discusión, de hace 30 años. Y poder saldarla significa entender qué es ser autónomos y qué consecuencias concretas tiene para la vida de cada porteño”.
Contexto
En dos meses, el 18 de mayo, está pautado que los porteños elijan a sus representantes para la Legislatura. El dirigente capitalino es uno de los más enemistados con los libertarios dentro de Pro y para la competencia en la Ciudad ambas fuerzas se ubicarán en carriles separados. Eso deriva en un alto nivel de fricción entre los dos partidos que reina en este momento.
Entre los legisladores que escucharon el discurso estuvieron los de la bancada de La Libertad Avanza (LLA), que en el último tiempo reforzaron sus críticas a la administración macrista.
Asimismo, Macri defendió sus avances en materia ejecutiva, tras los cuestionamientos que recibió no solo de los libertarios, sino también de parte de Leandro Santoro, que aparece como un fusil del kirchnerismo en la Ciudad, y hasta del exjefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta, que se subió a la pelea porteña esta semana y criticó el estado de la Capital.
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