El relax del fin de semana largo en Pinamar, uno de los balnearios más elegidos en el feriado puente que terminó ayer, se vio interrumpido anoche cuando un turista, de 65 años, le disparó en la cara a un subteniente de la policía bonaerense al que confundió con un ladrón.
Según las primeras versiones, el hecho ocurrió sobre la calle Cefiro casi en el cruce con Banes de Troya, cuando el visitante que es oriundo de Merlo, en la zona oeste del conurbano bonaerense, estaba en una vivienda de su propiedad en la que sonaba la alarma.
En ese momento, un patrullero que hacía un recorrido por la zona, se detiene, los dos oficiales bajan y se acercan hasta la vivienda donde se escuchaban gritos en el interior. Al suponer que se trataba de un robo, los oficiales quisieron entrar y, en ese momento, el turista efectuó dos disparos, uno de ellos ingresó por la mandíbula y salió por la nuca del policía de 32 años y que se desempeñaba como Jefe de Calle de la comisaría de ese sector de Pinamar.
Tras el confuso episodio, el turista fue aprehendido y trasladado a una comisaría donde quedó a disposición de las autoridades judiciales, el fiscal de turno era Juan Pablo Calderón, que le imputó, en una primera instancia, el delito de lesiones graves y exceso de legítima defensa. En la vivienda se encontró el arma utilizada por el turista, un revólver Smith & Wesson calibre .38, dos vainas servidas y cuatro proyectiles intactos. También se secuestró el arma del subteniente baleado que contaba con el total de los proyectiles.
Por su parte, el efectivo que recibió el disparo fue operado de urgencia en el hospital de Pinamar y, según pudo saber LA NACION, le tuvieron que practicar una traqueotomía y se encuentra internado con pronóstico reservado, pero estable.