Las zonas serranas de la provincia de Córdoba siguen enfrentando una grave situación debido a los incendios forestales que se mantienen activos en distintos puntos del territorio. Al inicio de este domingo, los bomberos continuaban combatiendo focos de fuego en Villa Berna, Salsacate y Capilla del Monte, donde el viento y las altas temperaturas dificultan los esfuerzos para controlar las llamas.
El intendente de Capilla del Monte, Roberto Schreiner, declaró: “Ya no hay riesgo para las viviendas, hay muchísimos bomberos trabajando, también está ETAC, la gente del Plan de Fuego, y los aviones ya están operando”. A pesar de los avances en algunas zonas, las condiciones climáticas siguen siendo un desafío clave. Schreiner subrayó que el cambio de viento durante la madrugada había bajado la temperatura en la zona, lo que permitió cierta mejora en el control del fuego, pero señaló: “El viento sur bajó la temperatura, pero todavía sigue con mucha intensidad”.
En cuanto a la situación en Villa Berna, el incendio que comenzó ayer por la tarde ha disminuido en intensidad, aunque aún requiere un esfuerzo considerable de los bomberos y los medios aéreos desplegados en la región. Los cortes de ruta siguen siendo una medida preventiva para proteger a los habitantes y facilitar las operaciones. La Policía de Córdoba informó que la ruta provincial S-273 está cortada en el kilómetro 10, entre Villa Berna e Intiyaco, mientras que la ruta nacional 38 permanece cerrada entre La Cumbre y San Esteban.
En paralelo, se confirmó la detención de un joven de 19 años, sospechoso de haber provocado el incendio en Capilla del Monte. La fiscalía de Cosquín lo imputó por el delito de incendio doloso, tras investigaciones que lo vincularon al origen de uno de los focos ígneos. El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, manifestó la intención de la provincia de constituirse como querellante en la causa judicial, buscando impulsar medidas más efectivas para detener los incendios.
En la última semana, cerca de 300 bomberos vienen trabajando intensamente en el área de Capilla del Monte, donde las condiciones extremas de calor y viento han obligado a evacuar a 54 personas y han dejado un saldo de 14 viviendas afectadas por las llamas. Las autoridades locales han dispuesto que los evacuados sean alojados en hoteles y cabañas de la zona. Schreiner destacó: “Queremos transmitir tranquilidad, los bomberos siempre vamos a estar allí”.
La situación sigue siendo crítica, y aunque los equipos de emergencia han logrado avances significativos, la falta de lluvias en la región complica aún más el panorama. Los esfuerzos continúan, mientras los habitantes de las sierras cordobesas esperan que las condiciones meteorológicas den un respiro.