Lionel Scaloni brindó una entrevista en la que se refirió a todos los temas tanto deportivos como de su vida privada. El entrenador de la selección argentina campeona del mundo en Qatar 2022 y bicampeona de América dialogó con con el medio Clank, de Juan Pablo Varsky, y ahondó en aspectos tácticos y estratégicos del equipo albiceleste, no sin antes revelar la reacción inicial de Lionel Messi cuando le contó que tomaría el mando de la Mayor en la Albiceleste, mientras dirigía el torneo juvenil de L’Alcudia.
“Armamos la lista sabiendo que Leo no iba a venir. Hicimos una videollamada con él y con Pablo (Aimar) decidimos contarle cuál era la situación porque creo que merecía saberlo. Él (por Messi) se puso contento y se empezó a reír. Lógicamente era llamativo, era un momento que no se esperaba que nos hiciéramos cargo, pero le dijimos con naturalidad vamos a dirigir estos dos partidos, necesitamos que vos lo sepas. Vendrán mayoría de chicos a la Selección y luego el que venga después de esos seis partidos que tome la decisión en base a lo que se vio. Messi nos apoyó, nos deseó suerte y fue un momento inolvidable. Teníamos una relación muy buena. Recuerdo que abrió los ojos y se reía, se puso contento porque sabía que nosotros queremos el bien de la Selección, no queríamos una renovación, porque es continua la renovación, pero sí darle un aire nuevo y que todo el mundo se sienta identificado”.
En este punto contó por qué el dibujo 4-4-2 es su predilecto y reveló detalles de la práctica “a memoria” que lleva a cabo el equipo en el predio de Ezeiza. “Pensamos que beneficia a nuestros jugadores (el 4-4-2). Estando siempre Leo, o cuando no está él, juega un mediapunta o juega otro delantero. Siempre tenemos dos. Por la simetría, me parece que es el sistema que hoy en día mejor se entiende y si hay que hacer una corrección es el más fácil para corregir. Cubrís mejor la cancha y si tenés que defender con cinco, siempre tenemos tres volantes de juego”, reconoció Scaloni. Vale recordar que los últimos encuentros de las Eliminatorias, el ataque argentino fue configurado de diversas maneras. En la reciente doble fecha, Julián Álvarez y Lautaro Martínez lideraron el frente ofensivo. Anteriormente, Messi compartió la delantera con otros números 9 según las necesidades del partido.
Asimismo, el oriundo de Pujato reveló cómo aplica sus estrategias y qué significa el entrenamiento “a memoria”. Esta metodología se centra en que los jugadores internalicen tanto sus movimientos como sus posiciones en el campo de juego, facilitando respuestas rápidas y efectivas durante los partidos. Según el propio Scaloni, esta práctica reiterativa permite una ejecución más fluida y segura de la táctica durante los encuentros oficiales. “Nosotros lo que les pasamos a ellos es cómo los queremos atacar. A veces atacamos dos y tres, a veces tres y dos para construir. Pero después, una vez que la reciben ellos, lo que hacemos en los entrenamientos acá que lo llamamos el 11 contra 0, que es atacar sin rivales, prácticamente a memoria, sabiendo dónde están tus compañeros”, precisó. Y agregó: “Ahí les decimos cómo queremos atacar y después ellos la van moviendo en base a donde están los compañeros. Pero sí analizamos al rival y creemos que le podemos hacer daño de esa manera”.
Ahondando en los entrenamientos, Scaloni contó qué jugada tiene totalmente prohibido realizar el plantel. “Ellos saben que está casi prohibido tirar un pase de espaldas a un compañero con uno atrás. No me gusta porque con solo anticipar la puntita del botín es una situación de gol. De hecho eso lo practicamos nosotros en los rivales. Esas son cosas ya las saben y si esa jugada se hace tiene que estar el volante central solo. Hay otros equipos que se la dan igual, como contó Dibu (Martínez en Aston Villa), pero yo no soy fanático de eso. Son cosas que como entrenador cada uno tiene su manera de entender”.
En otro pasaje de la entrevista, Scaloni contó el particular apodo que tuvo de joven y que estaba relacionado a un animal: Yegua. El DT explicó que el sobrenombre surgió debido a su costumbre de correr incansablemente, lo que llevó a compararlo más con una yegua que con un caballo. “Me decían ‘Yegua’, porque yo de chiquito corría. Era un animal, un caballo… Y en vez de caballo, me decían yegua”, relató Scaloni.
En tanto, a la hora de abordar cómo es la comunicación con los jugadores respecto a la toma de decisiones, manifestó que él siempre busca empatizar con los futbolistas: “Todas las decisiones que he tomado las hago siempre pensando en qué hubiera pasado si me tocaba a mi, o que me las dijeran a mi”. Además, reconoció que comunicarle a un jugador que no va a jugar o ser tenido en cuenta en la Selección “es lo peor” que le puede pasar como entrenador. “Uno tiene que aceptar que va a ser injusto desde el punto de vista que ese jugador merece jugar en ciertos momentos, pero también siempre sabiendo que lo hacen 11. Sobre todo en Argentina que hay un nivel increíble y quedan afuera grandes jugadores. Por suerte ellos lo han entendido, pero las injusticias deportivas seguirán estando, eso está clarísimo”.
Otras frases destacadas de Lionel Scaloni:
Su relación con Paulo Dybala y cómo tomó que haya rechazado ir a Arabia Saudita por la Selección:
“Además de ser un gran jugador, es el fiel reflejo de lo que es entender la situación y querer que le vaya bien a tu Selección y a tu gente. Siempre le dije el por qué de mis decisiones, es difícil encontrar personas como él. Es top, de los mejores, y entiende las situaciones del momento. Cada vez que estuvo fue clave y es un chico recontra valorado. Él declaró que pensaba en la Selección y nosotros esperamos su decisión. Ha sido muy valiente porque hoy en día no abundan estas decisiones de amor y de quedarte donde sos querido antes que irte a un lugar donde te ofrecen mucho más. Para nosotros es importante que él se siga mostrando en grandes niveles”.
Qué criterios debe tener un jugador para ser convocado a la Selección:
“Fundamental, que juegue bien. Que no le queme la pelota, que sepa en qué momento tiene que jugar. Nos gusta jugar, pero tenemos nuestros tips de dónde no podemos arriesgar. No me gusta perder la pelota en cierta parte de la cancha. Todos estos chicos nuevos si entienden lo que queremos, entonces vamos metiendo en base a lo que creemos que puede faltar”.
Las ausencias de Messi y Di María:
“Es irremplazable Leo. Son jugadores únicos, tanto Fideo como Leo. En el caso de Fideo que no va a venir más, no intentaremos buscar un reemplazante porque sería un error, no existe un jugador que haga lo mismo que él. Sí, que nos daba amplitud de ambos lados, más por la derecha, entonces intentaremos buscar un jugador que pueda aportar esa amplitud. Pero en el uno contra uno, en entender la jugada y sacar de la galera jugadas solo lo tenía él. El equipo tendrá que intentar jugar de otra manera porque no está Fideo”.
El detrás de escena del llamado con Di María tras no haberlo convocado:
“Se moría de ganas por estar, lo había demostrado. Pero estábamos muy pendientes de darle la posibilidad a Nico González, y traerlo junto a Ángel creíamos que no podíamos darle los minutos que necesitaba. Lo llamé después de esa charla que dio (Di María) por TV a los pocos segundos. Nos largamos a llorar juntos: él lloraba que quería estar y yo también porque nadie le dijo que no iba a estar. Le dije necesito que no estés para darle la posibilidad a Nico Gongzález y Ocampos porque tenerlo a la sombra a Di María no sé si podían dar lo que en ese momento necesitábamos. Bajo ningún concepto no es que no iba a estar más. Para el jugador que juega en su posición es muy bravo, el jugador quiere estar y por suerte él lo entendió. Aunque lógicamente era duro, pero para el grupo y la Selección fue positivo , porque esos chicos dieron ese paso que necesitábamos”.
Qué le pasó cuando analizó dejar la Selección previo a la última Copa América:
“Lo manejé natural y lo tenía que decir. Llevaba un año feo, durísimo durante las Eliminatorias a nivel personal y no estaba bien. Pasé momentos difíciles, tenía un montón de cosas en la cabeza y necesitaba hablar con los jugadores, mi familia, con los directivos, y comentarles lo que sentía. Tomarme un tiempo porque no había partido entre noviembre y marzo y el cuerpo técnico lo entendió. Se veía que yo no estaba al ciento por ciento. Es un lugar este que necesitás estar al 100 porque así lo requieren. Se venían cosas importantes, Ángel (Di María) se retiraba, podía ser la última Copa de Leo (Messi), eramos los campeones… Era una carga bastante fuerte y teníamos que estar todos alineadas, sobre todo el entrenador. No estaba bien y lo necesitaba decir. A nivel grupal creo que nos unió más como equipo. Tuve un montón de muestras de cariño de jugadores, del cuerpo técnico, de los directivos y de la gente en sí. Todos se interesaron por lo que sucedía, fue positivo y después se ganó la Copa, así que terminó siendo muy bien”.
La vida de Pujato y sus padres:
“La gran espina que tengo clavada es cuando conseguimos todo esto y no saber si ellos (sus padres) tomaron magnitud por su estado, porque no están como uno quisiera. Es lo que a mí me atormentó todo ese año después de haber ganado el Mundial. Ellos serían los tipos más felices del mundo, mi viejo es un tipo que vivió por y para el fútbol, por mí y mis hermanos, y dio todo de su vida para que seamos futbolistas. Y mi vieja igual, siguió a mi papá a todos lados como lo hace mi esposa. Entonces me atormentaba eso y siempre me va a seguir el no saber si ellos disfrutaron lo que hemos conseguido. Sería el regalo más grande que me ha dado la vida. No lo sé, creo que sí, que a veces lo demuestran y otras no, son cosas que pasan en la vida. Hay cosas más importantes que el fútbol. En estos cuatro años más importantes de mi carrera me han pasado cosas que me han hecho pensar que hay cosas más importante que el fútbol, a pesar que nuestro país el fútbol es una religión”.