Paulo Dybala tuvo una noche soñada en el Más Monumental en el partido ante Chile por las Eliminatorias para el Mundial 2026. Ingresó en el segundo tiempo con la camiseta número 10, la de Lionel Messi, y fue el encargado de meter el tercer gol para la Argentina. Todo el estadio se vino abajo en gritos y aplausos y sus compañeros corrieron a abrazarlo. Sin embargo, el festejo más eufórico fue el de Oriana Sabatini. Estaba en la tribuna y las cámaras captaron la llamativa reacción que tuvo luego de que su marido marcara el 3-0 para la selección argentina.
Tras no ser convocado por Lionel Scaloni para la Copa América, el jueves “La Joya” volvió a vestir la camiseta albiceleste, pero no la del número 21 que usó en el Mundial de Qatar, sino la 10, la de Messi, quien actualmente se recupera de una lesión. Ingresó desde el banco a los 79 minutos por Alexis Mac Allister y 11 minutos después, tras un pase de Alejandro Garnacho, pateó al arco y sentenció el partido.
Los otros dos tantos fueron de Mac Allister y Julián Álvarez, ambos en la segunda mitad del encuentro. Luego de que el delantero de la AS Roma gritara ‘gol’ las cámaras enfocaron a su esposa, Oriana Sabatini, quien estaba en la tribuna junto a su hermana Tiziana y otras amigas. La influencer no pudo ocultar su felicidad y saltó de emoción, con una cara de alegría que lo dijo todo.
Dado que su marido tuvo que volar a último momento a la Argentina, ella no lo dudó y organizó todo para estar presente en el partido. Su orgullo fue evidente y hasta compartió en sus stories de Instagram una publicación de Dybala que hizo la cuenta de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) y escribió “Te amo”.
La cantante y el futbolista cambiaron el estado de su relación desde la última vez que “La Joya” jugó para la selección argentina. El 20 de julio se convirtieron en marido y mujer tras una boda de ensueños que se realizó en Buenos Aires. Hace unas semanas trascendió que la pareja podría dejar Italia, puesto que Dybala recibió una oferta millonaria del Al-Qadsiah, de Arabia Saudita, sin embargo, la rechazó y decidió quedarse en la Roma. De momento continúan su vida en casa con sus dos perros y cuando pueden vistan la Argentina.