
La Unión Europea solicita un acuerdo entre los países del Grupo de los Siete (G7) para utilizar los activos rusos inmovilizados como medio de financiación para Ucrania.
Así lo afirmó Valdis Dombrovskis, comisario europeo de Economía, en una entrevista a la agencia AFP durante las reuniones organizadas por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial en Washington.
Este tema se encuentra entre los principales puntos de debate en la agenda del G7, donde altos funcionarios buscan forjar un enfoque unificado, con la participación de Estados Unidos y Japón.
Desde el inicio de la guerra en Ucrania, las sanciones y la inmovilización de activos rusos han resultado herramientas de presión económica clave contra el Kremlin.
La Unión Europea y el Reino Unido, entre otros actores, han inmovilizado miles de millones en bienes y capitales relacionados con Rusia o sus ciudadanos. Para sostener el apoyo financiero a Ucrania sin llevar a cabo la confiscación directa de dichos fondos, lo que implicaría riesgos legales y un aumento de la tensión con Moscú, los países europeos consideran alternativas.
Según información citada por Bloomberg, avanza una propuesta que plantea utilizar los activos bloqueados como garantías para préstamos destinados a Ucrania, de manera que la expropiación quede descartada.
Dombrovskis detalló que la iniciativa europea contempla conceder préstamos a través de Euroclear, la cámara de compensación ubicada en Bruselas, en la que se encuentran la mayoría de los activos rusos congelados por la UE.
Los fondos en efectivo derivados de estos activos serían transferidos a Ucrania en forma de préstamos, lo que permitiría la adquisición de armas, incluidas a proveedores estadounidenses y el fortalecimiento de la economía ucraniana, sin demoras hasta el final del conflicto ni el reconocimiento de indemnizaciones de guerra por parte de Rusia.
El modelo europeo recibe respaldo explícito del Reino Unido y Canadá, que manifestaron su disposición a colaborar con la UE en el desarrollo del mecanismo.
Por ejemplo, según datos del Ministerio de Asuntos Exteriores británico, el Reino Unido mantiene bloqueados más de 25.000 millones de libras (USD 33.300 millones) en activos rusos, mientras que la UE controla cerca de 200.000 millones de euros (€200.000.000.000, equivalentes a USD 232.000 millones), en su mayoría depositados en Euroclear.
El principal desafío, según diplomáticos occidentales, es la posibilidad de que Rusia emprenda acciones legales para intentar recuperar sus activos, lo que podría generar gastos inesperados y cuestionar la solidez del mecanismo. La UE está decidida a dar garantías a Euroclear y diseñar un marco legal robusto ante eventuales litigios internacionales iniciados por Moscú.
La concreción del acuerdo depende de una reunión clave en Bruselas la próxima semana, en la que los ministros de Finanzas europeos buscarán cerrar un pacto político que habilite los procedimientos legales y administrativos necesarios para la puesta en marcha de los préstamos respaldados por activos rusos bloqueados.
Si se alcanza un entendimiento, el mecanismo podría entrar en funcionamiento durante el segundo trimestre del año próximo, permitiendo el flujo de fondos hacia Ucrania en un contexto de mayor presión económica y militar sobre Kiev.
(Con información de AFP)