Después de las PASO lo discutimos”. La frase salió de la boca de Matías Tombolini, actual Secretario de Comercio, a modo de respuesta al reclamo de las empresas que participan de Precios Justos y que pretenden una actualización de los porcentajes de aumento que puede aplicar cada vez que el programa se renueva por otros tres meses.
Ocurre que el futuro del cepo a los valores, en especial de los productos de la canasta alimenticia con los que el Gobierno viene intentando, sin éxito, combatir la inflación, puede definirse de acuerdo al resultado que arrojen estos comicios primarios.
En el sector empresario entienden que los votos no acompañan a la fórmula oficial que encabeza el ministro de Economía, Sergio Massa, y sería imposible sostener el programa en las condiciones actuales.
Massa definiría nuevos aumentos de Precios Justos tras las PASO
Es decir, con un generalizado congelamiento de precios tanto para los artículos que componen esta canasta, como para el resto de los productos teniendo en cuenta que en los primeros las subas autorizadas llegan al 3,5% mensual, mientras que para el resto la autorización otorgada por la Secretaría de Comercio es del 5%, de manera independiente a la constante suba de los costos que debe afrontar el sector.
La última vez que la canasta oficial de alimentos con valores controlados por el Gobierno se actualizó fue a fines de junio pasado, cuando se acordó mantener el mismo esquema sin incrementos hasta el 15 de agosto próximo.
Lo resolvió el ente que depende del Ministerio de Economía con productores e importadores de los sectores de alimentación y bebida, además de los de línea blanca; electro; celulares; calzado; indumentaria; motos y bicicletas, es decir bienes durables y semi durables.
El futuro de los precios controlados dependerá de los votos que reciba Sergio Massa.
Entre los tipos de productos que se encuentran en la canasta hay aguas, gaseosas, arroz, galletitas dulces y saladas, azúcar, café, cepillos y pastas dentales, limpiadores, conservas, champú, acondicionador, pañales descartables, crema de leche, manteca, dulce de leche, leche, harina, jabón, lavandina, panificados, yogur y yerba, entre otros.
Participan del acuerdo 112 empresas (además de cinco empresas del Fideicomiso de Aceites y 18 empresas del Fideicomiso de Harinas y Fideos), de las cuales 39 son pymes, 62 grandes empresas y 11 son supermercados.
En ese momento, se definió mantener el acuerdo con el sendero de subas de 3,8% para la canasta de 2.000 productos y del 5% para el resto.
La cartera que dirige Tombolini ya había tenido acuerdos con estos rubros en el último año, pero la novedad es que en el anterior acuerdo se decidió no permitir actualizaciones mensuales tal como venía pasando, sino que se mantendrán los precios sin cambios hasta la próxima revisión el 15 de agosto.
Tombolini, contundente con los empresarios
En la última semana, el funcionario ya avisó a las compañías que participan de Precios Justos que la semana posterior a las PASO, que se llevarán a cabo el próximo domingo 13 de agosto, su secretaría llevará a cabo un relevamiento de precios y de costos para definir si se sigue manteniendo el mismo esquema con el que Precios Justo viene funcionando hasta ahora, o si se permitirán aumentos por encima de los porcentajes vigentes.
Para sostener los valores sin retoques, Comercio utilizó en junio pasado un argumento cuasi “extorsivo” ya que definió la continuidad del cepo “por todos los incumplimientos comprobados en los operativos realizados por la Secretaría, en la misma línea de lo que sucedió con el tema aceites en mayoristas. En general son sectores que incrementaron sus importaciones de insumos en promedio un 20%, con lo cual pueden hacer este esfuerzo”, aseguraron en aquel momento funcionarios cercanos a Tombolini.
La suba del 20% del precio de la carne le pone presión a la inflación de agosto y, por ende, al cepo a la canasta alimenticia.
Para las empresas, Precios Justos no va más
Sin embargo, desde las empresas consultadas por iProfesional advierten que no pueden seguir participando de Precios Justos hasta fin de año si no se les permiten subas que, por lo menos, se acerquen a los incrementos de costos que han venido sufriendo en los últimos meses y que van acorde a la evolución de la inflación.
De hecho, el índice de suba de precios divulgado todos los meses por el INDEC marca que aumentó 6% mensual en junio y acumuló en los primeros siete meses del año una variación de 50,7% y una interanual del 115,6%. A estas cifras deberían sumarse la inflación de julio, que fue del 7% y la que se estima para agosto que, según las consultoras privadas, rondará el 8% al 9%.
En el caso del dato oficial, habrá que esperar hasta el 15 de agosto, recién cuando el Gobierno dará a conocer los datos del INDEC.
Como contrapartida, las empresas que participan de Precios Justos solamente pudieron trasladar a sus precios la mitad de esos índices, con lo cual desde enero acumulan aumentos cercanos al 26,7% hasta julio pasado contra costos que holgadamente superaron el 50% durante el mismo lapso.
A esto, ahora se suma el nuevo impuesto a las importaciones anunciado por el ministro de Economía, Sergio Massa, hace una semana que se sumará al mayor costo que comenzó a tener la carne, con una suba del 20% nada más que durante la semana pasada.
En el caso de carne, el movimiento ocurrió luego de que el titular de la cartera de Hacienda definiera un nuevo “dólar agro” a $340 apuntando especialmente al maíz, principal alimento del ganado, por lo que rápidamente se sintió el impacto en las carnicerías.
Matías Tombolini analiza cambios al programa oficial luego de conocerse los resultados de las PASO del 13 de agosto.
En lo que respecta a la importación de bienes se establecen nuevas alícuotas de impuesto PAIS para ciertos bienes pero lo más significativo es que se cambió la metodología de pago y liquidación. Anteriormente se establecía el pago al momento de acceder al mercado libre y único de cambio mientras que ahora se dispuso un anticipo del 95% al momento de realizar el despacho a plaza.
“No podemos seguir como hasta ahora, cuando la inflación ya es incontrolable”, admitieron en una de las empresas que más productos aporta a Precios Justos, y desde donde se impulsa un pedido para flexibilizar el cepo.
En otra compañía admitieron haber mantenido charlas con Tombolini, en las cuales el funcionario “no confirmó que se vayan a mantener las pautas sin modificaciones después del 15 de agosto, sino que prometió conversar después de las PASO”.
Del mismo modo, desde la Copal, la cámara empresaria que agrupa a los productores alimenticios, pretenden que Economía aclare el alcance de la nueva medida que encarece las importaciones, ya que el propio ministro Massa prometió que no iba a impactar en los productos incluidos en Precios Justos y en los de primera necesidad.
Sin embargo, las empresas desconfían de la promesa del candidato a presidente por el oficialismo y reclaman que la decisión se refleje en los considerandos de la norma. Es decir, por escrito. “No podemos sostener la pauta del 3,5%, mucho menos con la suba de la devaluación diaria y la suba de costos”, agregaron desde otra empresa alimenticia líder.
“Será un tema a conversar luego de las paso”, reconocieron, teniendo en cuenta que en su producción pesan los farináceos y se contempla lo que suceda con el Fideicomiso sobre la harina que subsidia parte del costo y ayuda a amortiguar las subas de los precios de venta en la góndola.