Pasaron ya cinco meses desde la escandalosa separación entre Pampita y Roberto García Moritán. El matrimonio vivía una hermosa historia de amor de cinco años de matrimonio, aunque todo se desmoronó de un momento a otro cuando salieron a la luz fuertes detalles alrededor de los manejos del político y sus infidelidades hacia la modelo.
Ese fue el punto final, se separaron e hicieron un divorcio exprés para que todo quede en el pasado lo antes posible. En su momento trataron de que la ruptura sea lo más rápida posible. Pampita sintió el golpe de una nueva ilusión frustrada y formó pareja a las pocas semanas con Martín Pepa, pero de todas formas siguió manteniendo un vínculo de respeto con Moritán, sobre todo por su vínculo como padre de Anita, la hija que tienen en común.
En su momento y fiel a su estilo, Pampita se mostró muy diplomática al hablar de su ruptura amorosa y de hecho es recordado el día que se presentó en una nota con Susana Giménez y defendió a su ex de los insultos de la conductora. Sin embargo, el vaso de su paciencia se fue llenando y por estas horas una gota terminó por rebalsar todo.
¿Qué pasó? Si bien reinaba la paz, Moritán dio una nota con Mariana Fabbiani en DDM y dijo que “le dolió” que en su momento la modelo haya difundido una serie de chats sobre el tipo de vínculo que tenían como matrimonio. A esto se suman las acusaciones y hasta “amenazas” que Lucila Fernández Llanos, la madre del político y exsuegra de la famosa, había hecho tiempo atrás.
EL VERDADERO MOTIVO POR EL CUAL PAMPITA DETESTA A SU EX SUEGRA TRAS DIVORCIARSE DE MORITÁN
Esto terminó encontrando el enojo de Pampita, que en una reciente nota con A la tarde salió a responderle: “Vos viste como soy yo, con la verdad. No me gusta la mentira y me vuelvo loca con esas cosas. Ahí había un problema de fechas, él decía que hacía mucho que estábamos separados y yo salí a decir que no, por eso mostré los chats”.
“Para mí era importante decir cuando había pasado todo. Tampoco quería que la gente piense que andaba en el Martín Fierro fingiendo algo, o que tengo una relación comercial o por un interés político”, agregó la jurado del Bailando, que luego advirtió: “Provocarme a mí es meterte en una que no te conviene”.
Fue entonces cuando Pampita recordó las declaraciones de su exsuegra y confesó que es algo que nunca pudo olvidar: “Me molestó porque no sabían la verdad y entonces opinaban desde el lugar de desconocer. Me molestó muchísimo, me enojó muchísimo y estoy enojada hasta el día de hoy. Esas cosas yo no las perdono”.
Por último, Pampita lanzó una indirecta hacia Moritán haciendo referencia a sus nuevos vínculos, marcando la cancha de cómo se siente hoy y diferenciándose de la familia del empresario gastronómico: “Hoy no tengo ganas de forzar cosas. Solo me junto con gente que me hace bien, que me quiere, que me cuida, que me valora”.