Edward Norton ha construido una carrera cinematográfica destacada, consolidándose como uno de los actores más versátiles de su generación.
Sus interpretaciones en películas emblemáticas lo han convertido en un referente del cine contemporáneo, mientras que su compromiso con causas sociales y medioambientales le ha dado un papel relevante fuera de la pantalla.
En su agenda, destaca la próxima entrega de los Oscar -el 2 de marzo-, donde Norton competirá como Actor de Reparto, por su labor en Un perfecto desconocido dando vida a Pete Seeger, referente del folk y amigo de Bob Dylan en sus inicios.
El actor detrás de los personajes icónicos
Nacido el 18 de agosto de 1969 en Boston, Massachusetts, Edward Harrison Norton creció en Columbia, Maryland, en el seno de una familia acomodada.
Desde temprana edad mostró interés por la actuación y, tras estudiar Historia en la Universidad de Yale, decidió dedicarse de lleno al cine.
Su debut en la gran pantalla llegó en 1996 con Primal Fear, interpretación que le valió su primera nominación al Oscar y lo posicionó como una de las grandes promesas de Hollywood.
A partir de ahí, Norton encadenó una serie de papeles desafiantes que lo consolidaron como un actor de gran talento y profundidad.
En American History X (1998) interpretó a un neonazi reformado, un papel complejo que le otorgó otra nominación al Oscar.
Sin embargo, fue con El club de la pelea (1999), dirigida por David Fincher, que alcanzó el estatus de actor de culto, compartiendo protagonismo con Brad Pitt en una de las películas más influyentes de su generación.
Otros títulos destacados de su filmografía incluyen The Score (2001), junto a Robert De Niro y Marlon Brando; The 25th Hour (2002), un drama dirigido por Spike Lee; The Illusionist (2006), en la que dio vida a un misterioso mago en la Viena del siglo XIX; y The Incredible Hulk (2008), donde interpretó a Bruce Banner en el Universo Cinematográfico de Marvel.
Más recientemente, Norton fue nominado nuevamente al Oscar por su papel en Birdman (2014), una sátira sobre el mundo del espectáculo dirigida por Alejandro González Iñárritu. Además, en 2019 protagonizó y dirigió Motherless Brooklyn, un thriller basado en la novela de Jonathan Lethem.
En 2024, interpretó al músico folk Pete Seeger en A Complete Unknown, la biopic de Bob Dylan protagonizada por Timothée Chalamet.
Compromiso con el activismo y la filantropía
Más allá de su trayectoria en el cine, Edward Norton ha desarrollado una fuerte labor como activista y filántropo.
Su compromiso con el medio ambiente lo llevó a impulsar iniciativas como el programa BP Solar Neighbors, que proporciona paneles solares a familias de bajos recursos en el este de Los Ángeles.
Además, Norton ha trabajado activamente en la Enterprise Foundation, una organización sin ánimo de lucro dedicada a rehabilitar viviendas para familias de escasos recursos en diversas ciudades del mundo.
Su compromiso con estas causas lo llevó a ser designado Embajador de Buena Voluntad de la Organización de las Naciones Unidas para la Biodiversidad.
A lo largo de su carrera, Edward Norton ha sido nominado en tres ocasiones a los premios Oscar: Mejor Actor de Reparto por Primal Fear (1997), Mejor Actor por American History X (1999) y Mejor Actor de Reparto por Birdman (2015).
Entre los galardones que ha obtenido destacan el Globo de Oro a Mejor Actor de Reparto por Primal Fear (1997) y el Premio del Sindicato de Actores por su trabajo en Birdman (2015).
Además de su éxito en Hollywood, Norton ha incursionado en el mundo de las inversiones. Se estima que su patrimonio neto asciende a 300 millones de dólares, gracias no solo a su trabajo como actor, director y productor, sino también a inversiones en tecnología y bienes raíces. Fue uno de los primeros inversionistas en Uber, lo que le generó importantes ingresos.
A lo largo de los años, Edward Norton ha mantenido su vida personal en un perfil relativamente bajo. Estuvo vinculado sentimentalmente con la actriz Salma Hayek antes de casarse, en 2012, con la productora Shauna Robertson, con quien tiene un hijo.
Edward Norton no solo ha demostrado ser un actor de talento excepcional, sino que ha sabido combinar su carrera artística con un fuerte compromiso social y medioambiental.
Su capacidad para dar vida a personajes complejos y su dedicación a causas altruistas lo han convertido en una figura influyente tanto dentro como fuera de la pantalla.
Con más de tres décadas en la industria cinematográfica y un legado de interpretaciones memorables, su impacto en el cine y en la sociedad seguirá resonando por muchos años más.