1. Tika

Yavi

Atendida por sus dueños, esta posada es el mejor sitio para alojarse y conocer Yavi, un destino rico en historias, casi en la frontera con Bolivia.

Los anfitriones de la Posada Tika, Gustavo Gaspar y Silvia Aluffi. Ella, una arquitecta cordobesa, y él un ingeniero de la capital jujeña.

Tika fue construida según las costumbres locales, con gruesas paredes de adobe que mantienen frescos los ambientes en verano y caldeados en invierno.

Las ocho habitaciones se organizan alrededor de un patio central, un spot que los viajeros eligen para el mate de la tarde, las charlas distendidas o el espectáculo de las estrellas cuando cae la noche.

Una de las ocho cálidas habitaciones de la posada.Para instalar su posada, la pareja tuvo que pedir una solicitud a la pequeña comunidad: “Les explicamos que queríamos integrarnos con respeto por sus costumbres”.

El sitio está atendido por sus dueños, Gustavo Gaspar y Silvia Aluffi. Ella, una arquitecta cordobesa, y él un ingeniero de la capital jujeña, que se instalaron en este pueblo de 250 habitantes en 2014. Gustavo es un gran conocedor de la historia local y Silvia, una dotada cocinera, encargada de los sabrosos platos –que elabora solo con reserva previa– para los huéspedes. Entre las especialidades figuran su pastel de papas con carne de cordero, la sopa crema de zanahorias dulces con curry, risotto de quínoa con hongos y panceta, y los exquisitos sorrentinos de remolacha rellenos con papa oca, almendras y miel.

  • Tika RP 5, esq. Av. Senador Pérez. Whatsapp (388) 549-0380. IG: @posadatikayavi

La cocina casera es uno de los puntos fuertes de la propuesta.

2. Campo Morado

Huacalera

Para disfrutar de la calma pueblerina y la atención personalizada, una casa donde todo gira en torno al viajero. Ambientes agradables y cocina casera.

La posada Campo Morado.

Lindísima posada ubicada en el plácido pueblo de Huacalera, ideal para aquellos que busquen hospedarse lejos de las multitudes en la Quebrada de Humahuaca.

La casa tiene una impronta familiar. Está comandada por su dueña y anfitriona, Alicia Palacio, quien hace unos años dejó Metán (Salta) y se trasladó a este pueblo donde encontró su “lugar en el mundo”.

Una de las habitaciones de la posada.

Enamorada del paraje, montó cinco habitaciones (simples, dobles, triples), ambientadas con un tono delicadamente rústico y personal. Cada cuarto cuenta con el detalle extra de una terracita privada.

El patio central oficia de una suerte de sala al aire libre, donde se sirve el desayuno y es el espacio preferido por viajeros para hacer fiaca o leer. Alicia cocina platos muy caseros, sólo para sus huéspedes y con reserva previa.

Cuando Alicia Palacio descubrió la cálida casona supo que era

Desde la posada se organizan paseos guiados, visitas arqueológicas y encuentros con artesanos locales.

  • Campo Morado RN 9 Km 1789. Tel: (3876) 66-8931. IG: @campomoradohotel

3. Aldea Luna

Tilquiza

A 20 km de San Salvador de Jujuy, esta reserva ocupa 900 hectáreas de yunga y propone una estadía con eje en el conservacionismo.

El comedor de la posada.

El camino lleva casi dos horas, hay que vadear un río y luego animarse a una trepada que exige destreza al volante. Después, todo es disfrute: monte espeso y una increíble biodiversidad. Bosques de talas, churquis y nogales, frutillas silvestres, helechos, musgos, hongos. Por allí, revolotean los zorzales, colibríes, carpinteros y se escuchan las chicharras.

Trekking al ojo de agua dentro de la reserva Aldea LunaLos propietarios de Aldea Luna: Martín Baldoni y Elizabeth Amar.

Martín Baldoni y Elizabeth Amar, sus propietarios, aspiran a conservar aquí la naturaleza intacta, por eso la mayor parte del tiempo albergan investigadores.

Una vez al mes reciben turistas: programas de 4 días y 3 noches (con fecha fija) y todo incluido: comidas, trekking, curso de iniciación al avistaje de aves con salidas, traslados in-out y alojamiento.

Desayuno en Aldea Luna, Jujuy.Interior de una de las cabañas de Aldea Luna.

Las cuatro cabañas tienen baño propio. Uno se puede alojar en modalidad privada o en versión compartida, tipo hostel.

No hay luz, ni wifi, ni celular, tampoco carne: la cocina es vegetariana.

  • Aldea Luna RP 34 Km 17. Whatsapp: (388) 52-27043. IG: @reserva.natural.aldealuna

4. El Arribo

San Salvador de Jujuy

Calidez, comodidad y buen gusto conforman la esencia de esta antigua casona, a cuatro cuadras de la peatonal.

Leticia Balut fue la encargada de dar una nueva vida a la casa de su abuelos. Así, la residencia familiar, construida del siglo XIX, se reinventó como un pequeño hotel.

La casa familiar del siglo XIX fue reconvertida en hotel.

El perfil del sitio se destaca dentro de la oferta hotelera de la ciudad. Las trece habitaciones se abren sobre dos patios: uno con galería y pisos calcáreos, el otro con piscina, solárium y rodeado de jazmines.

Los cuartos de adelante pertenecen a la construcción original: los techos son altos, los pisos conservan la pinotea y las ventanas exhiben los antiguos postigos de madera.

El Arribo se destaca dentro de la oferta hotelera de la ciudad.

Las habitaciones del segundo módulo son de construcción reciente y la decoración es contemporánea y minimalista. Algunos cuartos tienen una categoría superior: tienen mayores dimensiones, pava eléctrica y una selección de tés a disposición.

El desayuno llega cada mañana con huevos revueltos, panes, fiambres y medialunas.

  • El Arribo Belgrano 1263. Tel: (388) 422-2539/ 605 6908. IG: @elarribojujuy

5. La Sala de Yolanda

Lozano

Los bisnietos de la niña Yolanda (la de la zamba) reciben en la que fue su casa, muy cerca de las lagunas de Yala.

La casa de 300 años fue posta histórica, lugar de encuentro de artistas y, desde hace dos años, hotel boutique.

El casco de la estancia (que en el norte llaman “sala”) mantiene el espíritu de sus primeros tiempos. Nació como una posta sobre el Camino Real, allá por 1776 cuando Domingo Carenzo, enviado del rey de España, llegó a tierras jujeñas. Más tarde fue su casa familiar, una tradición que continuaron sus descendientes hasta nuestros días.

Los descendientes de Yolanda Carenzo: Facundo, Sofía y la mamá de ambos,

Aquí vivió la niña Yolanda, un personaje célebre durante la primera mitad del siglo XX. Fueron famosas las tertulias de música, arte y poesía que ella organizó en esta casa, reuniones que convocaron a personajes como Atahualpa Yupanqui y Jaime Torres.

A Yolanda le dedicaron la Zamba de Lozano (letra de Manuel J. Castilla y música de Gustavo Cuchi Leguizamón), una pieza clave del cancionero folklórico argentino.

El parque con vista a los cerros tiene piscina y un arroyo con puente colgante.

Hoy Facundo y su hermana Sofía Carenzo, bisnietos de Yolanda, reciben en la finca familiar que intenta mantener viva la costumbre de puertas abiertas.

La estructura original se conserva casi intacta: las pesadas puertas de madera, anchas e impecables, los altos techos y los pisos de cerámica. Por dentro, los espacios están ambientados con muebles de época. Son tres cuartos: dos dobles con cama matrimonial y baño en suite, y uno en versión triple con el baño de época restaurado, que está afuera.

La Sala de Yolanda ofrece la oportunidad de habitar una casa que alberga mucha poesía, mucha música, mucho arte.

Hace poco inauguraron la primera cabaña con capacidad para seis pasajeros con tres cuartos y un baño, además de cocina equipada y living comedor.

La galería que enmarca la casona tiene una linda vista al parque donde está la piscina.

Llamas de visita en la galería.

La estadía incluye desayuno, pero en la cabaña tiene costo adicional. Recientemente añadieron el servicio de cena que se brinda con menú fijo de tres pasos. Además, se contempla la variante infantil con alternativas sencillas para los más chicos.

Las habitaciones son apenas dos, lo que garantiza una atmósfera íntima.

Ubicado a 20 km de la ciudad de San Salvador de Jujuy, el sitio es un buen punto de partida para aquellos que quieran conocer las lagunas de Yala y el Angosto de Jaire. La zona de Lozano es el último manchón verde antes de entrar al paisaje árido de la Quebrada de Humahuaca.

6. Hotel del Ingenio

Libertador Gral. San Martín

Coqueto hotel inaugurado en 2007 en lo que fue la proveeduría y panadería del ingenio azucarero Ledesma.

Los 11 cuartos se armaron conservando la estructura original: algunos dan a la calle y otros a la galería que se abre a un jardín. Dentro se observan muebles de época: sillas, sillones, apliques, arañas, hasta las puertas del antiguo horno de pan fueron restaurados para dar vida a este nuevo establecimiento. En el desayunador, las fotografías en blanco y negro registran los días del lugar en el siglo pasado.

Hotel del Ingenio, una buena base para explorar el PN Calilegua.

Libertador Gral. San Martín es un buen centro de operaciones para conocer el PN Calilegua, a 30 minutos en auto, y las termas del Río Jordán.

  • Hotel del Ingenio Av. Keiner y Florida. Tel: (3886) 43-2150 Whatsapp: (3886) 69-9930. IG: @hoteldelingenio21

7. Los Ranchos

Purmamarca

Las dos casas, ubicadas en las afueras del pueblo, están equipadas para alojar a 5 personas, una alternativa para los viajes en familia o en grupos de amigos.

Rosario Lemos, su propietaria, ambientó los interiores con tejidos de tonos cálidos y otros muy intensos. Los muebles se diseñaron especialmente para cada una de las viviendas.

Los Ranchos ofrece la opción de alojarse en casas individuales.

Las casas cuentan con dos habitaciones con baño en suite, cocina y living con hogar a leña. Los espacios más buscados son el patio de suculentas y el parque con sillones para disfrutar el mate y la parrilla.

Alrededor, todo conduce al relax: los cerros multicolores, los potreros de alfalfa, el viento, el cantos de los pájaros. Servicio de limpieza y blanco.