Cimbronazo político o cisne negro, el caso del senador entrerriano Edgardo Kueider agitó las aguas de la política argentina y, mientras algunos evalúan sus consecuencias, en la Cámara alta se hacen cuentas para saber si un proceso de expulsión puede llegar a concretarse.
Por la tarde, la Justicia paraguaya determinó que debían permanecer con prisión preventiva y una fianza de 150 mil dólares para acceder a prisión domiciliaria.
Ayer fue el momento de las acusaciones cruzadas: espacios políticos y dirigentes culpaban a sus adversarios políticos y les asignaban la responsabilidad por los actos del sindicado legislador.
El transfuguismo de Kueider ayudó a la confusión general: llegó al Senado en la boleta del Frente de Todos en 2019, se alejó de ese espacio, se alineó con los peronistas díscolos y más tarde, ya durante la presidencia de Javier Milei, fue fundamental para aprobar la Ley Bases.
El jefe de Estado, la vicepresidenta Victoria Villarruel y la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner pasaron las últimas horas intercambiando la ascendencia política sobre Kueider, quien ya no tiene quien lo defienda y lo asuma como propio. ¿Es oficialista u opositor? No es un dato menor si de números se trata en el Senado.
“Todo tuyo, Cristina Kirchner. Fin”, escribió Milei en X, su red social favorita. Lo mismo había dicho ayer al ingresar al Hotel Hilton para cerra la CPAC local. Lo llamó “un problema del kirchnerismo”.
“Si hubiera sido mío no votaba la Ley de Bases, querido Javier”, retrucó la presidenta del PJ. En la Cámara baja esas declaraciones fueron leídas de una manera contundente: “Arriba le soltaron la mano”.
Claro es que, cuando exista la primera oportunidad, el peronismo buscará la destitución del senador. Deberá ser sobre tablas ya que la comisión de Asuntos Constitucionales, la que tendría que tratar el tema, es conducida -paradójicamente- por el propio Kueider.
Llegado el momento, dentro del peronismo aspiran a que nadie quiera defender al legislador. Usando la terminología del presidente Milei, quien no vote por su destitución, será señalado públicamente, en una especie de “principio de revelación”.
“El entrerriano no es muy querido dentro de ningún espacio. Siempre fue un tipo muy aceitoso. No es que haya un movimiento para defenderlo, solo puede pesar lo corporativo”, dijeron cerca del espacio de La Libertad Avanza.
En el bloque radical también creen que es posible que avance el apartamiento: “El peronismo tiene un número importante y son los que lo piden. Ayer el gesto de Milei fue explícito diciendo que no era de ellos. Uno tiende a creer que nadie lo defendería”.
En Unión por la Patria son los más interesados en llevar adelante la acción. No sólo sienten que sirve para mostrar la corrupción del Gobierno y de uno de sus aliados, sino que la salida de Kueider habilitaría la llegada de un reemplazo que volvería a integrarse a su bloque, incrementando el poder de fuego peronista en la Cámara alta.
“Acá depende de juntar los votos. Y ahí a cualquiera que no levante la mano habría que revisarle la Declaración Jurada”, dispararon en el despacho de un influyente senador kirchnerista.
Cómo avanza la investigación sobre Kueider en Paraguay
Mientras tanto, el juez penal paraguayo Humberto Otazú, había adelantado que a lo largo de la jornada de hoy resolvería si Kueider y su secretaria continuarán detenidos, y aclaró que el legislador no tiene inmunidad y es “un ciudadano común, en este caso un turista más” que carece de prerrogativas.
“Él aquí se rige ahora por la ley penal paraguaya, y si bien en Argentina es senador, aquí no tiene esa condición, es como un turista, como cualquier otro”, ya que sólo se le reconocería sus fueros parlamentarios “si estuviese en visita oficial”.
En declaraciones a Radio Splendid, Otazú, quien tiene a su cargo la causa, confirmó que Kueider “se encuentra en carácter de detenido por la supuesta comisión de contrabando en grado de tentativa”, al igual que su secretaria Iara Guinsel Costa, y ambos están bajo imputación de realizada por el fiscal.
El magistrado puntualizó que el delito de contrabando tiene en Paraguay una pena máxima de 5 años de prisión, aunque indicó que al tratarse de “tentativa” la pena podría ser “más baja”.
Kueider y su secretaria fueron detenidos ayer en la madrugada cuando intentaban ingresar a la ciudad paraguaya de Ciudad del Este procedentes de la brasileña Foz do Iguazú, a través del Puente de la Amistad que une a ambos países, cuando la policía registró su camioneta de alta gama y encontró una mochila con más de 200.000 dólares cuyo origen no pudieron justificar.
En virtud de que el máximo permitido sin declarar es de 10.000 dólares, los efectivos policiales y de aduana procedieron a detener a ambos, incautaron el dinero y la camioneta y procedieron a dar parte a la fiscalía, que los imputó por tentativa de contrabando y dispuso su detención inmediata.