Delfina de Lellis se autodefinió como una participante combativa. Y así lo está demostrando en los primeros días de convivencia en Gran Hermano aunque, en las últimas horas, no pudo evitar que la invada la preocupación ya que se acerca la primera gala de elimiación y está nominada. “No puede conectar con nadie”.
De la localidad de Saenz Peña, en el partido de Tres de Febrero, los padres de Delfina se desempeñan como docentes y ella como modelo. Dueña de una belleza indiscutida, en su presentación en la competencia hizo una radical advertencia que concuerda con su postura ante el juego de convivencia y y resistencia mental.
“Vengo a demostrar que las modelos no somos solo una cara bonita”, planteó De Lellis. Para luego, en primera persona, sincerarse sin vueltas. “Reconozco que me enojo muy rápido”, dijo la joven de 22 años. Pero eso no fue todo… También reveló uno de sus costados más “picantes”.
“Me encanta pelear. Me enoja la mentira y los hipócritas y que me menosprecien”, aseguró Delfina. Y, como si fuese poco, De Lellis también contó otro aspecto de su personalidad al compartir su característica de hiperactiva, de esas personas que “le cuesta quedarse en la cara“.
ALARMA E INSEGURIDAD POR LA PRIMERA ELIMINACION EN GH
En una de las habitaciones de la casa más famosa del país, se generó una charla entre Delfina y Chiara (Mancuso), donde la mannequen dejó al descubierto sus miedos.“Si quedaría esta placa, no te vas ni en pedo, sos chica y siento que no te pueden juzgar. Luciana tiene todos los votos, no puede conectar con nadie, pobre”, se le escucha decir a Chiara.
“Al contrario, la ven pobrecita y la gente la deja ‘ay la excluyen!'”, evaluó Delfina. “Igual, nosotras no la excluimos”, intentó “salvar” la conversación Mancuso a fin de no quedar expuestas como integrantes de la competencia que “hacen a un lado” a una compañera.