A 13 años y casi cinco meses de la desaparición de María Cash, la diseñadora bonaerense que fue vista por última vez el 8 de julio de 2011 en Salta fue detenido un camionero y mañana será indagado.
Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. El sospechoso, de apellido Romero, sería la última persona que tuvo contacto con Cash antes de su desaparición.
Romero subió a la joven en el camión que manejaba, cuando hacía dedo a un costado de la ruta nacional 34, a la altura de General Güemes. Y, según dijo, la llevó hasta paraje Las Palomitas y él continuó viaje.
La jueza federal de Garantías N°2 de Salta, Mariela Giménez, indagará mañana a Romero. En el momento de su desaparición, la diseñadora de indumentaria tenía 29 años. La semana pasada había sido imputado por el delito de falso testimonio el abogado Carlos Enzo Cuellar.
La investigación por la desaparición de Cash, que hoy tendría 42 años, está a cargo del fiscal general Eduardo Villalba y tomó impulso en el último tiempo después de que el representante del Ministerio Público descartara pruebas falsas.
“Del análisis de estos reportes, se establecieron contradicciones y falsedades de parte de varios testigos que originalmente aportaron información y que habrían desvirtuado la dirección de las investigaciones, motivados principalmente por la posibilidad de acceder al pago de la recompensa. Saneado el expediente, la fiscalía consideró necesario volver al minuto cero de la desaparición de la joven, a fin de poder reencauzar la investigación. En ese marco es que se requirió las testimoniales de las personas que, ya sea directa o indirectamente, vieron o tuvieron contacto con Cash. Si bien resta analizar las nuevas declaraciones, la fiscalía quedó satisfecha con este paso, puesto que se pudieron confirmar ciertos indicios, pero también surgieron elementos que robustecen una línea de sospecha que podría darle un giro al caso”, se había sostenido en el sitio de noticias de la Procuración General de la Nación, www.fiscales.gob.ar, al informar sobre el impulso de la investigación encarada por el fiscal Villalba.
Cash había viajado a Jujuy para vender la ropa que ella misma diseñaba. Tomó un ómnibus en la terminal de Retiro el 4 de julio de 2011. Un día después llegó a Tucumán, donde subió a otro ómnibus y se dirigió a Rosario de la Frontera, en Salta.
“Un camionero la acercó hasta la rotonda de acceso a la localidad santiagueña de La Banda, desde donde viajó a Jujuy. Llegó el 6 de julio. Allí, realizó una llamada telefónica a un amigo jujeño, tras lo cual fue vista cuando hacía dedo. También se estableció que llamó a su familia, mientras que alrededor de las 23.34 de ese día fue captada por las cámaras del peaje Aunor, en el acceso a la ciudad de Salta. El jueves 7 de julio de 2011, en tanto, se registró su ingreso en el hospital San Bernardo en horas de la mañana, donde pidió atención médica, pero se retiró. De las personas que la vieron surgió que la joven se mostraba físicamente deteriorada. Más tarde, a las 9, personal del peaje Aunor encontró su mochila. Y a las 12, un remisero informó que la había trasladado del barrio Portezuelo, cercano al hospital, hasta el acceso a la capital salteña. Al otro día, Cash tocó la puerta de una vecina en la avenida Tavella, en la misma zona de acceso a la ciudad. En esa vivienda, la joven pidió asilo, pero no lo consiguió. Luego fue vista por dos empleados de una estación de servicio ubicada en la rotonda de Torzalito, en la ciudad salteña de General Güemes. A uno de ellos le dijo que no estaba alterada ni perdida. Posteriormente, a las 16.30, un camionero la vio hacer dedo en la ruta 9/34, la levantó y la trasladó hasta una gruta de la Difunta Correa, siendo este el último registro que los investigadores tiene de ella”, según la publicación de www.fiscales.gob.ar.