Durante el martes 19 de noviembre y el miércoles 20 se llevó a cabo el segundo repechaje en Bake Off. Una de las que se hizo presente fue Karina Jelinek. Como siempre, sus comentarios causaron muchas gracia e hicieron reír a los presentes, más que nada al contar algo insólito.
Cabe recordar que, en el primer repechaje, la modelo no se presentó y fue sustituida por Alejandra Maglietti. En aquella ocasión tenía mucho trabajo en otros lugares, por lo que se negó a regresar al reality culinario conducido por Wanda Nara en Telefe.
Sin embargo, parece que su agenda se liberó, ya que en el segundo repechaje la convocaron y aceptó con gusto. De hecho, estuvo muy cerca de entrar nuevamente al show. Lamentablemente para ella el lugar fue ocupado por Damián de Santos, quien sí retomó su lugar en el ciclo.
A pesar de que no volvió, Karina dejó grandes declaraciones durante su participación en el repechaje. La morocha confesó que no sabía cómo prender el horno. “Ay, no sé cómo funciona el horno”, sostuvo la mediática, quien provocó las risas de los demás presentes.
LA ESTAFA QUE SUFRIÓ KARINA JELINEK
“Esta persona es la que recibió por parte de Jelinek $155.000 dólares. Un montón de millones en pesos y joyas que, en conjunto, superan los $200.000 dólares. Este señor es el que era el ´papá´ de Karina a nivel sentimientos… Horrible. Ella está muy mal, no solo por el tipo de delito sino por la persona a la que denunció”, reveló el abogado de Jelinek.
Y Karina agregó: “El hombre, de nombre José Luis, era como un padre para mí. Tenía relación diaria de amistad y confianza, pero me estafó. Ahora me estoy dando cuenta de que en realidad no era la persona que yo creía. Mi mayor miedo era que no tenga mi plata, la cual le di para que guarde en su caja fuerte porque yo no tengo. Y resulta que no solo no tiene mi plata sino que está inventando que yo le debo a él”.