Con el aumento de las temperaturas, las visitas inesperadas a nuestro hogar se multiplican. Tal vez te haya pasado que, al abrir una ventana o caminar por el jardín, te encontraste con una lagartija corriendo rápidamente hacia algún rincón seguro. Estos pequeños reptiles pueden despertar sentimientos de curiosidad, temor, o incluso preguntas sobre qué significa su presencia. En el mundo del esoterismo, los animales suelen considerarse portadores de mensajes más profundos, y las lagartijas no son la excepción.

La creencia en el significado simbólico de los animales es algo que se remonta a culturas ancestrales. Civilizaciones antiguas, como la egipcia y la celta, veían a ciertos animales como mensajeros divinos, vínculos entre el mundo de lo terrenal y lo espiritual. Esta percepción también está presente en tradiciones esotéricas modernas, donde cada criatura tiene un simbolismo que puede ofrecer respuestas o mensajes ocultos. Así, ver a un animal de manera repetida o en circunstancias particulares puede interpretarse como una señal del universo. En el caso de las lagartijas, estos pequeños visitantes también poseen su propia carga de simbolismo.

Esto es lo que significa tener lagartijas en casa

Para muchas culturas, las lagartijas representan la adaptabilidad y la renovación. Por ejemplo, en la mitología de algunas tribus nativas americanas, se las considera un símbolo de protección y buena suerte. Su capacidad para regenerar la cola si la pierden en una situación de peligro las convierte en un emblema de resistencia y cambio, según un sitio especializado en estas temáticas.

Sobre esa característica física de estos animalitos, en el esoterismo, la lagartija simboliza la transformación y la capacidad de dejar atrás lo que ya no sirve para avanzar hacia un futuro mejor. Por eso, ver una lagartija en el hogar puede interpretarse como una invitación a desprenderse de cargas innecesarias y adaptarse mejor a los cambios que se experimentan. Su presencia también está asociada con la intuición y la agilidad mental, y anima a moverse rápido frente a los desafíos y a no quedarse atrapados en problemas que podrían resolverse con flexibilidad.

¿Por qué aparecen lagartijas en las casas?

Para muchas culturas, las lagartijas representan la adaptabilidad y renovación

Con el calor, es común encontrar lagartijas en las casas. Estos pequeños reptiles buscan lugares cálidos y secos donde puedan refugiarse y encontrar alimento. Las zonas urbanas con jardines, terrazas y patios ofrecen ambientes ideales para que se instalen, ya que suele haber insectos y varios sitios donde esconderse.

En lugares como la Ciudad de Buenos Aires, las especies de lagartijas más comunes son pequeñas y se las puede ver en espacios soleados. Les atraen las ventanas abiertas y los muros o paredes calientes. Su presencia es especialmente frecuente en barrios como Palermo, Agronomía o Belgrano, donde hay más vegetación y áreas abiertas que favorecen su hábitat natural.

A pesar de que muchas personas pueden sentir cierto rechazo hacia las lagartijas, la realidad es que estos pequeños reptiles son totalmente inofensivos para los humanos, según publicaron en el medio especializado Critter Stop. No representan un riesgo para la salud ni traen problemas de higiene, ya que no transmiten enfermedades ni dañan la estructura del hogar. Además, su presencia incluso puede ser beneficiosa, ya que ayudan a controlar la población de mosquitos y hormigas.

Estos animales buscan lugares cálidos y secos donde refugiarse

¿Cómo evitar que entren en tu casa si no te gustan?

Si bien las lagartijas no son peligrosas, es comprensible que algunas personas prefieran evitar su presencia dentro del hogar. Para prevenir que entren, se pueden tomar algunas medidas sencillas.

  • Mantener las ventanas y puertas cerradas, o colocar mallas de protección, es una buena forma de impedir su entrada.
  • También es útil eliminar posibles fuentes de alimento, como insectos.
  • Evitar dejar luces exteriores encendidas por mucho tiempo, ya que estas atraen a los insectos y, a su vez, a las lagartijas.
  • Sellar grietas y huecos en las paredes también puede ayudar a reducir sus escondites.

Por Prensa Pura Digital

DIARIO DE VILLA LA ANGOSTURA Y REGIÓN DE LOS LAGOS. NEUQUÉN.