Tim Walz, gobernador de Minnesota y ex aspirante a la vicepresidencia en la fórmula demócrata, brindó el viernes un emotivo discurso en la ciudad de Eagan en el que reconoció la derrota electoral y llamó a sus seguidores a “mantenerse firmes” ante el próximo mandato de Donald Trump. “Es duro perder”, admitió Walz.
El gobernador hizo un llamado a sus simpatizantes para “recuperar fuerzas” y afrontar los retos que anticipa. “Si hoy se sienten desanimados, lo entiendo. Tómense un tiempo. Cuídense”, aconsejó, dirigiéndose a un público visiblemente afectado por los resultados.
Walz se mostró empático con la frustración de sus seguidores, prometiéndoles que seguirá luchando junto a ellos y que estará listo para unirse cuando retomen el activismo.
Como líder de un estado progresista, subrayó su compromiso de mantenerse activo en la política local y nacional, y de seguir defendiendo valores y derechos esenciales para el Partido Demócrata.
Walz también expresó su gratitud a Kamala Harris, quien lo seleccionó como compañero de fórmula en la última etapa de la campaña, luego de que el presidente Joe Biden decidiera no presentarse a la reelección.
“Estoy agradecido de haber formado parte de una campaña poderosa y alegre, bajo el liderazgo de Kamala”, señaló, destacando el rol fundamental que Harris asumió al dar continuidad al proyecto demócrata.
Con tono distendido, Walz incluso hizo gala de su sentido del humor, bromeando sobre la cantidad de donas que consumió en los eventos de campaña y disculpándose por los numerosos mensajes de texto que enviaron al electorado, una estrategia que generó comentarios entre los votantes.
El gobernador también aprovechó su discurso para reafirmar su compromiso con el derecho al aborto en Minnesota.
“Mientras sea gobernador de Minnesota, protegeremos el derecho de la mujer a tomar sus propias decisiones en materia de atención médica”, afirmó, en un mensaje claro de resistencia ante cualquier intento de limitar derechos reproductivos, un tema que ha estado en el centro de los debates políticos en los últimos años.
Con 60 años y al frente del gobierno de Minnesota desde 2019, Walz había sido una figura de perfil bajo a nivel nacional hasta el pasado verano, cuando sus duras críticas a Trump y su enfoque progresista lo posicionaron en el centro de la atención mediática.
Esta exposición lo convirtió en un aliado atractivo para Harris, quien buscaba un político con arraigo en el Medio Oeste. Walz concluyó su discurso con un mensaje de unidad y esperanza, recordando a sus simpatizantes la importancia de mantener vivos los ideales democráticos y la resistencia frente a las políticas que considera regresivas.
(Con información de EFE)