Todo pasó en menos de 48 horas y por un motivo específico. Cristina Kirchner y Axel Kicillof se mostraron juntos en el acto por los 47 aniversario de Abuelas de Plaza de Mayo en el Teatro Argentino de la ciudad de La Plata; en un encuentro que exteriorizó la tensión que se exhibe en el marco de la discusión por la elección y el rumbo interno del peronismo.
La ex presidenta y todo su universo está decidida a jugar a fondo por la conducción del Partido Justicialista. Kicillof manifestó a través de un comunicado el último fin de semana que apela a un escenario de unidad entre el espacio de CFK y el del gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela. En ese escrito, también dijo no entender los ataques dentro de su propia fuerza, en un mensaje al kirchnerismo e incluso a la ex mandataria, que al cierre de la semana pasada había dicho que “los poncios pilatos y los judas no van más en el peronismo”, y que tenía que ser el gobernador bonaerense el que tenía que “hablar con Quintela”, para que desista con su postulación porque “sus ministros son los que están buscando avales” para el riojano.
El encuentro entre ambos dirigentes se dio en un contexto de suma tensión interna. Fue la titular de Abuelas, Estela de Carlotto, la que se calzó un rol de conciliadora. El martes, al cumplir años, recibió el llamado de Cristina Kirchner, quien le confirmó que asistiría a la actividad en el Teatro Argentino. Este miércoles, la titular de Abuelas habló con Kicillof. Al terminar su actividad de gestión -estuvo en Castelli y Punta Indio- se confirmaba su presencia en el acto.
Sin embargo, la entrada en conjunto de ambos fue una escena particular. Cristina Kirchner al frente, Carlotto en el medio y Kicillof detrás. El cántico que se impuso fue “Cristina presidenta…”. Luego, la ex presidenta saludó al auditorio y tomó asiento. Una más a favor de CFK: “Cuánto les falta para entender, que no fue magia nos conduce una mujer”.
También asomó el “olé, olé, olé…Axel, Axel” y “Axel querido, el pueblo está contigo”. Ahí fue cuando el gobernador se paró y se dio vuelta haciendo la Ve con ambas manos. Cristina ya estaba sentada por saludar a la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza. No hubo charla a solas. Solo esperaron el inicio del acto a un costado del escenario junto a colaboradores y personas de la organización. Cristina Kirchner participó de una actividad co-organizada por el gobierno de la Provincia de Buenos Aires después de casi dos años.
La ex presidenta y el gobernador fueron ubicados en la primera fila del acto para conmemorar los 47 años de la organización de Derechos Humanos. En el medio de ellos dos se sentó su presidenta, Estela de Carlotto; en una primera fila que completaron Taty Almeida, Eduardo de Pedro y la vicegobernadora Verónica Magario, entre otros.
La tensión y el contrapunto en el cancionero mermaron cuando empezó el acto en cuestión que estuvo conducido por los nietos recuperados Manuel Gonçalves y Leo Fossati, que lanzaron una señal implícita en el marco de las acciones de Abuelas. “Cuando estamos juntos demostrados que nada es imposible como lo demostraron la Abuelas”.
Sí hubo coincidencia en el cántico del público cuando finalizó un video en el que se recordó a distintas integrantes de Abuelas: “Somos de la gloriosa juventud peronista, somos los herederos de Perón y de Evita…”. Funcionó como bálsamo la actuación del cantante de Él Mató a un Policía Motorizado, Santiago Motorizado, que fue el primeros de los artistas que pisó el escenario de la imponente Sala Ginastera en la tarde noche de este miércoles. Cantó “La noche eterna” y “El Tesoro”.
Con Abuelas corriéndose de la interna, hubo presencia tanto del sector de Kicillof con intendentes de su construcción política e integrantes del gabinete; como así dirigentes que trabajan por la candidatura de Cristina Kirchner a la presidencia del PJ.
La celebración de Abuelas terminó con todos los artistas que participaron de la jornada interpretando Puente, de Gustavo Cerati. Y las palabras de Estela de Carlotto sobre el escenario. Otra gestualidad sucedió en ese momento. Al subir al escenario su butaca quedó vacía. De un lado Cristina, del otro el gobernador. Rápido de reflejos, Wado de Pedro se ubicó en el espacio vacío.
“Aunque tengamos diferencias políticas, somos argentinos y tener hoy acá el honor de Cristina y el honor del gobernador demuestran que nada está perdido. Si algunas vez nos equivocamos…respetuosamente háganlo saber. Miren yo levanto el dedo de directora de escuela y digo basta”, dijo la titular de Abuelas.
También planteó que “la Patria nos necesita” y nuevamente un cántico al unísono que fue “la Patria no se vende…”. Pidió acompañamiento a los gobernantes. También habló de “gente buena de este país que nos está ayudando”, como intendentes al alertar la situación económica por la que atraviesa Abuelas.
“Esta es una noche muy especial, en un lugar muy especial. Allá por el 2005 y el 2007 estuvimos. Aquí en mi ciudad, La Plata cuando los veo a muchos de ustedes me acuerdo de nuestros años de estudiantes, cuando veo a estas mujeres a los nietos lo estoy viendo a él en cada uno de ustedes. A la vida hay que celebrarla y tener memoria. Nos quieren joder en el presente y robarnos el futuro, no lo vamos a permitir, dijo Cristina Kirchner que finalmente habló luego de las palabras de Carlotto.
Su breve intervención terminó con nuevamente el cántico de “Cristina presidenta”. Pero el último que habló fue Kicillof; que reivindicó que la celebración se lleve adelante “en un teatro recuperado de la desidia de la derecha”, en alusión a la gestión de María Eugenia Vidal. Kicillof también planteó: “Estamos festejando el cumpleaños de Estela. Gracias Estela, memoria, verdad, justicia, son 30 mil”. Luego se reivindicó por los desaparecidos y la ex presidenta quedó sobre el escenario saludando.