El ámbito de la internet satelital transita un momento de crecimiento acelerado en la Argentina, con mayor interés por parte de los usuarios, más propuestas de servicios y nuevas inversiones para mejorar la conectividad.
En este contexto, la empresa argentina Orbith es uno de los protagonistas del mercado local, tanto por los servicios que ofrece actualmente a hogares y empresas, como por los planes para ampliar su cobertura y diversificar tecnologías. Entre ellos se destaca la iniciativa para lanzar un satélite propio, que será el puntapié inicial de una constelación.
Sobre estos proyectos que se despliegan rápidamente, El Cronista conversó con Agustín Lebrero, gerente de Marketing y Comercial de la compañía.
– ¿Por qué es importante hoy la conectividad satelital?- Es muy relevante, fundamentalmente, en zonas rurales, no solo para hogares, sino también para organismos públicos y empresas. Hay alrededor de 2 millones de hogares en zonas rurales, por lo que el impacto de la tecnología satelital es significativo. Y también puede ser una solución para escuelas, comisarías, hospitales y empresas en estas áreas.
– ¿Cuáles son los planes de Orbith para el lanzamiento de su propio satélite?- A finales del próximo año lanzaremos nuestro primer satélite, el Orbith 1. Será fabricado por Astranis, una empresa especializada estadounidense. Esto será solo el comienzo de nuestra propia constelación de satélites y marcará un hito histórico, porque somos la primera empresa latinoamericana en invertir en su propio satélite con capital privado.
Este lanzamiento representa un paso gigante hacia la reducción de la brecha digital en la región. Al tener nuestro propio satélite, podremos ofrecer soluciones más adaptadas a las necesidades específicas de Latinoamérica, con mejor cobertura y a precios más competitivos. Estamos convencidos de que este es el comienzo de una nueva era en la conectividad.
Actualmente, estamos presentes en toda Argentina y gran parte de Chile. En el próximo año, planeamos expandirnos a Paraguay, Uruguay y zonas de Brasil. Nuestra visión es ser un jugador clave en toda Latinoamérica, y el lanzamiento de nuestro propio satélite es un paso que resulta fundamental en esa dirección.
– ¿Cómo impactó la llegada de Starlink al país?- El arribo a la Argentina de competidores como Starlink fue un catalizador positivo para toda la industria. Nos ha impulsado a ser más creativos y eficientes, lo que se tradujo en un fuerte crecimiento de nuestra cartera de clientes. Esta competencia no solo nos beneficia a nosotros, sino que también contribuye al posicionamiento y conocimiento de la internet satelital en general.
En este contexto, nuestro enfoque diferencial se centra en ofrecer al cliente un servicio integral. Además de la tecnología de punta, proporcionamos asesoramiento personalizado en la venta, instalación técnica y atención al cliente 24/7. También ofrecemos un servicio multiórbita para clientes corporativos, combinando tecnologías GEO y LEO para garantizar una disponibilidad que es, prácticamente, del 100%.
Además, somos muy competitivos en velocidad. Para cliente residenciales ofrecemos hasta 100 Mbps de bajada y 10 Mbps de subida, similar a nuestros competidores, pero con garantías de servicio.
De hecho, nuestra propuesta de servicio incluye conectividad vía satélites de diversas constelaciones, como las de Eutelsat OneWeb, optimizada para empresas por su nivel de seguridad, y la de la propia Starlink.
– ¿Qué futuro tiene la industria de internet satelital?- Lo que viene es muy prometedor. La competencia está impulsando la innovación y mejorando los servicios, lo que llevará a una reducción significativa de la brecha digital en la región. Creemos que en los próximos años veremos un crecimiento exponencial en la adopción de internet satelital, especialmente en áreas rurales y remotas. La competencia nos mantendrá a todos en constante evolución, lo que en última instancia beneficiará a los usuarios finales con mejor conectividad y más opciones.