El Gobierno logró mantener el superávit fiscal un mes más pero esto implicó una aceleración del ajuste del gasto, según los economistas privados, con un recorte del 30% en septiembre. Por dónde pasó la motosierra y las complicaciones en los próximos meses.
Con ingresos por $ 62,95 billones y gastos de $ 62,25 billones, se obtuvo un resultado primario, en el noveno mes del año, de $ 0,6 billones y en el acumulado del $ 8,2 billones que si se le descuenta los pagos de la deuda quedó en $ 0,2 billones y $ 0,7 billones respectivamente.
Un resultado al que el Gobierno llegó por medio de recortes. “En septiembre, el gasto primario real devengado tuvo una caída del 29,7% interanual. Considerando los primeros nueve meses, la contracción fue del 30,1% comparado con igual período del año pasado”, destacaron en el informe de Analytica.
Nuevamente, frente a la política de obra pública cero, fue esta la partida que mayor variación negativa presentó en el mes (-73,1%), seguida por “Transferencias a provincias” con -58,1% por el destino de $ 0,3 billones (versus los $ 0,7 billones de septiembre de 2023) y “Bienes y servicios” con -43,1% ($ 0,2 billones vs. $ 0,4 billones respectivamente).
“Se aceleró la caída en subsidios”, remarcaron desde la consultora que lidera Ricardo Delgado. A partir de que se ejecutaron $ 0,3 billones menos que en el mismo mes de 2023 ($ 0,8 billones vs. $ 0,5 billones). Una situación que también se destacó en el informe la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
En donde se reveló que las transferencias a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A. (CAMMESA) sumaron $ 2,86 billones, lo que implicó una variación año/año real del – 34,5%. Similar a la que presentó ENERSA del 34,0% a/a real con $ 1,55 billones para solventar la compra de gas importado.
Un recorte en menor medida sufrió “Gastos de personal” (-22,1%) y las partidas de “Jubilaciones, pensiones y PAMI” (-9,3% v.ia) al recibir $ 3,8 billones en comparación a los $ 4,2 billones del mismo mes que en 2023. Siendo un recorte cuya magnitud se redujo en los últimos meses por la aplicación de la fórmula previsional indexada a la inflación con dos meses de retraso.
“Desde marzo el gasto en jubilaciones y pensiones viene desacelerando su caída: en el acumulado a septiembre cayó 20,0% real, 12 puntos porcentuales por debajo de la caída máxima registrada en el acumulado a febrero”, comentaron en la OPC.
La cartera de Pettovello
En el mismo mes en donde se conoció que a la finalización del primer semestre de 2024 el 52,9% de los argentinos era pobre (Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC)), los gastos en “Programas sociales” sufrieron una variación interanual negativa del 47,4%. Aunque se destacó el aumento del 8,6% en la Asignación Universal por Hijo (AUH) y las familiares.
A la par, en medio de la disputa entre el Gobierno y las universidades por fondos, en dicho mes el gasto de la Secretaría de Educación se redujo un 56,1% interanual real, lo que llevó a que en los primeros nueve meses la caída acumulada sea del 37%.
“El programa más relevante es “Desarrollo de la Educación Superior” que representa el 77% del gasto total de la Secretaría. En septiembre tuvo una caída interanual real del 30,5% y en lo que va del año del 30,4%. El 99% del programa lo integran las transferencias corrientes a las universidades”, afirmaron en Analytica.
Ingresos adelantados
Si bien el resultado al que llegó el Gobierno se logró por el recorte de partidas, también se debió en gran parte a la generación de nuevos ingresos y el adelantamiento de otros que se aprobaron en el Congreso por la Ley 27.743.
Como los del Régimen de Especial de Ingreso del impuesto sobre los Bienes Personales (REIBP) o la moratoria. Medidas con las cuales, según el último informe de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), se sumó una recaudación de $ 881.133 millones y $ 0,28 billones respectivamente.
Por su parte, con el Régimen Especial de Regularización de Activos, el Gobierno se hizo de una nueva fuente de recursos, cuyo mayor caudal, entró a las arcas del estado en septiembre ($ 10.075 millones del total de $ 10.208 millones) ante la fecha de corte de la “Etapa 1” que luego se prorrogó hasta el 31 de octubre de 2024, inclusive. Por lo que también habrá en ese mes y en menor los siguientes por las alícuotas más altas.
Otra importante contribución la generó el impuesto a las Ganancias. A partir del vencimiento de la presentación y pago del saldo de la declaración jurada de personas humanas del período fiscal 2023, pero también por el error que admitió el secretario de Hacienda, Carlos Guberman en la actualización de septiembre (dos meses de inflación en lugar de tres, como establece la ley).
En cuanto al impuesto PAIS, la tendencia se revirtió. “Cambió la dinámica de las variaciones interanuales de este impuesto, y en septiembre (…) cayó un 26,8% AxIPC producto de la reducción de 10 p.p. de la alícuota. Descontado este efecto, la variación negativa es producto de la caída de los volúmenes importados por sobre el efecto tipo de cambio”, destacaron en la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).
Pese a ello, se trata de un caudal de ingresos que se destina el 70% a al financiamiento de los programas a cargo de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES)y de las prestaciones del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados. Y que se eliminaran, por lo que establece la ley en diciembre, dejando un vacío difícil de sortear para el Gobierno.