Marco Ferraz es el presidente de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA) en América del Sur. Durante su visita en la Argentina, en la Feria Internacional de Turismo (FIT) que se desarrolló en Buenos Aires, habló de la industria en el país. Aseguró que para crecer es necesario inversión y políticas de Estado.

En el inicio de la temporada alta -que dura hasta abril del año que viene-, el empresario reconoció que “el sueño es tener barcos todo el año”. Pero aseguró que para que eso suceda será necesario una regulación adecuada, mayor conectividad y una mejor infraestructura.

¿Cómo está la industria de cruceros?

La industria de cruceros  viene mejorando. El año pasado llegaron 31,7 millones de pasajeros, es un crecimiento del 7% comparado a 2019 ,que fue el último año prepandemia. 

En CLIA, tenemos 53 navieras. América del Sur es una región importante para la asociación. Por primera vez, tenemos un millón de cruceristas viajando en barcos en América del Sur. Paralelamente, tenemos un millón de cruceristas de la región viajando en todo el mundo, es un mercado muy grande 

Los destinos internacionales a los que viajan los residentes en América del Sur es Caribe y después Europa.

¿Cómo es en Argentina?

En la Argentina, tenemos tres tipos de operaciones. Una es de cabotaje, que se quedan entre tres y seis meses en Uruguay y Argentina con itinerarios circulares. Después hay cruceros que hacen vuelta al mundo que pasan por Latinoamérica y llegan a la Argentina en temporada de verano. Y por último, hay barcos que hacen Antártida y parten desde Ushuaia con itinerarios de entre siete y 14 noches. 

La Argentina tiene tres puertos: Buenos Aires, Puerto Madryn y Ushuaia que son muy importantes. Para esta temporada vamos a tener 130 recaladas en Buenos Aires, en donde hay un diferencial porque hay muchos barcos que se quedan dos o tres días.

Por su parte se espera que Madryn tenga 43 recaladas con 60.000 pasajeros y Ushuaia que son barcos más pequeños de expedición son 550 recaladas, es un número increíble. Hay hasta 13 barcos en la ciudad.

¿Ese número viene en crecimiento?

Es muy similar al del año pasado. En los últimos dos años son prácticamente lo mismo.

¿Cuál es la temporada alta de cruceros?

Arranca ahora en octubre y dura hasta abril. Nuestro sueño es tener barcos todo el año y hay que hacer mucho por la región (Brasil, Uruguay, Chile y Argentina) para mantener los barco acá. Nuestro invierno, que coincide con el verano de Europa, es ideal. Para eso tenemos que tener costos razonables, una regulación adecuada, infraestructura y de esta forma deberíamos tener la oportunidad de crecer mucho.

¿Qué se necesita puntualmente para tener cruceros todo el año en la Argentina? ¿Decisiones gubernamentales?

Estamos con apoyo muy grande del Ministerio de Turismo, de la provincia, de la Ciudad. Tenemos que buscar costos similares a los de Europa o el Caribe. En este momento los costos son muy altos. Estamos hablando con el gobierno para bajarlos, para tener una infraestructura actualizada, con muelles, terminales de pasajeros, visados para los tripulantes, visados para los turistas, hay que tener una mayor conectividad aérea.

Hay que entender que una recalada de un barco en Buenos Aires cuesta nueve veces más que en Barcelona. El desafío es fuerte. Es clave que los costos realmente sean competitivos para que las compañías grandes puedan elegir la región con sostenibilidad en el tiempo.

¿La carga impositiva en la Argentina es más alta también que en Europa?

Somos más caros que en Europa y el Caribe. Florida es la meca, ahí hay muchas atracciones. Si una persona quiere hacer un crucero en Miami llega una semana antes, visita todos los parques. 

Cómo hacer para imitar a Florida…

Si queremos hacer lo mismo en América del Sur hay que tener conectividad, oferta de vuelos variada. Los americanos son los máximos cruceristas del mundo, ellos pueden venir al país, conocer la región, es una oportunidad para que gasten en turismo local.

¿Cuáles son los países desde donde llegan más turistas y en qué público se está trabajando?

El principal público son los brasileños. Perlo los de más lejos son los americanos y europeos que vienen a Buenos Aires y visitan Ushuaia. Hay barcos que hacen Buenos Aires hasta Valparaíso en 14 noches. Estamos creciendo, hay una oportunidad. Tenemos costos competitivos comparados con otros destinos para atraer más barcos y cruceristas para que conozcan  la región.

Un dato importante: CLIA tiene 62 nuevos barcos en los libros de pedidos hasta 2026 con 50.000 camas adicionales. Estamos necesitando nuevos destinos y América del Sur es un destino importante para venir desde el Caribe y Europa . Vienen barcos de octubre hasta abril.

Este referente en cruceros explica qué debería hacer la Argentina para duplicar la llegada de barcos

El turismo receptivo está cayendo, ¿eso impacta en la industria de los cruceros?

Por el momento, los números de cruceros son los mismos que el año pasado. Pero 2025/2026 estamos buscando mejorar la performance. Tenemos que presentar un plan de costos en el corto y mediano plazo para que Brasil, Uruguay, Argentina y Chile puedan sumar nuevos barcos

¿Cómo se incentiva al turismo?

Es un tema que está en la mesa. Estamos hablando con las provincias y con todos los jugadores para que los costos bajen. Los cruceros se manejan con dos o tres años de anticipación y los temas de discusión son a largo plazo. Es importante tener acceso a los nuevos combustibles.

¿Están trabajando en esto?

En CLIA, firmamos un acuerdo para bajar en un 40% los gases de invernadero hasta 2030 y al 100% a 2050. Hay muchas inversiones en tecnología, buscamos inversiones en los puertos para invitar a los nuevos barcos que van a consumir un nuevo combustible y hay que tener todo listo en los próximos cinco años. Es importante que ya se empiece a discutir esto.

Son necesarias las inversiones también por parte de los gobiernos de la región

Tenemos diálogo desde el año pasado con el Gobierno. Hablamos con la Armada, que hace una representación de la Argentina en la OMI que hace la regulación de nuestra industria. El avance de los combustibles es vital, estamos avanzando para ver qué rumbo la industria va a seguir y ver que tienen que hacer los países para adaptarse. En esta región tenemos nitrógeno, biodiesel. Estamos aguardando y buscando apoyo para adaptarse a las nuevas tecnologías.

En este momento estamos produciendo barcos para operar con más de un combustible: GNL, BioGNL, biodiesel. 

¿Cómo ve a la Argentina en este aspecto?

La Argentina tiene que invertir mucho porque en general son puertos de carga. Nuestro sector puede mejorar mucho si tenemos el foco puesto en las inversiones, con terminal apropiada, con muelles exclusivos para barcos que son de hasta 350 metros y 6000 pasajeros. 

En la Argentina, el barco más grande que llega tiene capacidad para más de 5000 pasajeros. Son muy modernos, tecnológicos. Necesitan la inversión de los puertos. Todavía hay un camino por recorrer de los turistas que llegan a Buenos Aires a través de los cruceros. Se esperan 130 recaladas para esta temporada que empieza ahora. Por eso es muy importante y venimos trabajando con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Un crucerista que llega a Buenos Aires gasta entre u$s 100 y u$s 120 por día y también impacta en la generación de empleo. Es un impacto importante, siempre hay que mirar eso para apoyar. Hay que trabajar con los agentes de viajes porque son responsables del 80% de las ventas, capacitar al agente, buscar el destino. El 87% de los turistas que llegan al destino por el crucero quieren volver después a esa ciudad. Es importante conocer las estadísticas de la industria.

¿Cómo fueron los números después de la pandemia?

En 2019 tuvimos 29.8 millones de cruceristas. En 2020, bajamos a 5,8 millones cruceristas. En 2021, 4,8 millones, pero ya en 2022 tuvimos 20 millones de cruceristas. El salto se dio en 2023 con 31,7 millones. El crecimiento en toda la industria se movió muy rápido. Estamos esperando 35 millones de cruceristas para el próximo año, es un récord.

¿Cómo se trabajó a partir de pandemia?

Los protocolos fueron muy bien hechos por la industria en conjunto con las autoridades sanitarias. Aquí en América del Sur ,hablamos constantemente con Salud y eso hizo que se recuperara muy rápido. Logramos trabajar muy bien con los protocolos. Los turistas volvieron a elegirnos rápido porque entendieron que somos un medio muy seguro.

Al argentino le gusta el all inclusive…

Si, incluye transporte, alimentación, entretenimiento y alojamiento. Las excursiones se pagan aparte. Pero es muy conveniente. No es necesario hacer check in o check out. Es una experiencia muy interesante. El que lo hace un año, ya se fideliza y lo hace todos los años.

¿Cuál es el publico principal de los cruceros?

Son muy democráticos, sobre todo los mas grandes, hay para todas las edades y para todos los bolsillos. La edad media es de 45 años en América del Sur. 

¿Y los precios?

Los Premium, que son de 2000 camas, cuestan en promedio u$s 450 por día y los de lujo, que son barcos menores, que son los que llegan a Ushuaia salen más de u$s 450. Los de expedición son los más caros. 

¿Cómo ves a la Argentina y su potencial de crecimiento. ¿A qué plazas te gustaría que lleguen los barcos?

Es un país espectacular con muchos paisajes. Buenos Aires tiene gastronomía, la gente es muy simpática. En Madryn, hay que crecer. Hay que duplicar las recaladas. Ushuaia necesita inversión hay que extender el muelle. Hay que sumar hoteles de cinco estrellas. Me gustaría sumar a Mar del Plata en donde se tiene que hacer una inversión. Hay mucho que hacer. El potencial es muy grande.

Por Prensa Pura Digital

DIARIO DE VILLA LA ANGOSTURA Y REGIÓN DE LOS LAGOS. NEUQUÉN.