Facundo Bono, el supuesto hijo de Martín Demichelis, publicó un largo descargo en sus redes sociales para contar su verdad. En el posteo, el pibe de 22 años desmintió varios rumores sobre su relación con el ex técnico de River. Una de las cosas que aclaró fue si recibía plata de “Micho”.
“Voy a desmentir un par de cosas que se dijeron, como que Martín no supo nunca de mi existencia y lo de que me invitaron a vivir a México, jajaja, ojalá fuera real algo de eso”, escribió Facundo. Viviendo en Justiniano Posse, Córdoba, dejó claro que hay una historia que solo ellos conocen. “Pero está todo bien, puertas para adentro sabemos cómo pasaron las cosas”, agregó.
Sobre el apoyo económico, Facundo dijo: “Tampoco es verdad que me pasaba dinero desde el 2012, porque laburo desde que tengo 11 años”. Contó que siempre se esforzó por mantenerse. “Durante mi secundaria fui albañil, pintor, gasista, electricista, kiosquero, heladero, mozo, canillita, ya que en mi casa no había para los gustos”, explicó, mostrando que siempre se las ingenió.
Además, Facundo destacó lo importante que fue trabajar para conseguir lo que quería. “Había que ganárselos”, afirmó. También habló de su vida actual, mencionando que, mientras estudiaba, tuvo muchas experiencias laborales. “Después, en paralelo a mi carrera universitaria, me dediqué siete años a viajar y conocer lugares y gente mediante el turismo”, contó.
LA PASIÓN DEL HIJO DESCONOCIDO DE MARTÍN DEMICHELIS
El joven también mencionó su pasión por el arte: “Hice pasantías en estudios de arquitectura y hace poco más de tres años que me dedico a los tattoos”. En su mensaje, expresó sus sueños y planes. “Me considero alguien hipersoñador y creativo”, cerró, dejando en claro que tiene un montón de proyectos en mente.
Mientras tanto, Evangelina Anderson, la pareja de Martín, reaccionó a la historia de Facundo con un posteo llamativo en sus redes. Aunque no habló directamente del escándalo, compartió un video de la decoración de Halloween de sus vecinos. Esto generó más comentarios sobre la situación, pero Anderson eligió mantener el foco en su vida y no meterse en la polémica.