Se define como amigo del presidente, Javier Milei, pero no hace propaganda sobre un posible futuro cercano maravilloso. Sobre el corto plazo, recomienda tomar decisiones como si no vaya a ocurrir una devaluación. No se atreve a proyectar la continuidad de la inflación porque si fluctuara entre 3% y 4% no sería “novedad”, según su visión. El economista Juan Carlos De Pablo destacó el dato de 3,5% del Índice General de Precios (IPC) de septiembre pero volvió a hablar de una de sus preocupaciones: la importación.

En diálogo con Radio Con Vos, el economista analizó que “lo importante es que esa reducción no se produjo con congelamiento de precios ni ningún dibujo”. Incluso, habló de tarifas de servicios públicos, cuya reducción de subsidios llevó a que los consumidores paguen más dinero a fin de mes. De hecho, uno de los datos significativos del informe del Indec sobre septiembre es que los bienes aumentaron 3% y los servicios, 4,6%.

Fiel a su estilo descontracturado, el economista evitó brindar una proyección sobre cómo continuará el sendero de la inflación. “Es como que un médico hiciera una teoría entre 37,2 grados y 37,9 grados”, sostuvo a propósito de los movimientos de la inflación mensual entre el 4% y el 3%. Para De Pablo, eso puede ser noticia pero no “novedad”. Esto último sería si comenzara con un 2%.

“Ningún dibujo”: el análisis de Juan Carlos De Pablo sobre el dato de inflación y qué es “lo importante” para Milei

A propósito de una de las variables que más le importan a los argentinos, De Pablo reiteró que a sus clientes les recomienda tomar decisiones sobre la base de que no va a haber una devaluación. Vinculado a eso, observó que el Gobierno tiene “buenas razones” para evitar un salto del dólar porque eso podría ocasionar que la inflación vuelva a dispararse.

“Inflación desacelerada con actividad en recuperación”, fue la definición más contundente sobre el escenario general. A propósito de esto último, el economista reforzó la idea de que lo peor ya habría pasado. “Se tocó fondo entre abril y mayo”, dijo. En ese sentido, indicó que “no podemos hablar de recesión como un parate generalizado pero lo que sí es cierto es que la realidad es heterogénea”.

Un claro ejemplo de dicha disparidad son la industria manufacturera y la construcción. Según datos del Indec, estos sectores experimentaron distintas curvas. La industria mostró una suba intermensual del 1,5% y la construcción, un retroceso del 2,9%.

Y con una mirada más centrada en la microeconomía, De Pablo puso sobre la mesa una de las luces de alerta que preocupa en la industria nacional, así como también al economista amigo de Javier Milei. “Hoy la importación tiene mejores abogados que la producción local”, lanzó. Vinculado a eso, reclamó mayor énfasis en otras cuestiones ajenas al comercio exterior. Por ejemplo, citó a “las tasas, los Moyano que te paran los camiones, o un juez que te liquida con alguna sentencia laboral”.

Otra parte del diálogo estuvo relacionada al debate político legislativo más importante que tendrá el Gobierno en los próximos meses: el Presupuesto 2025. Más allá de los números, De Pablo intentó resumirlo en sólo dos artículos a la denominada “ley de leyes”. Dijo: “Artículo 1 déficit fiscal cero; Artículo 2, vamos a ver cómo hacemos eso”.

Por Prensa Pura Digital

DIARIO DE VILLA LA ANGOSTURA Y REGIÓN DE LOS LAGOS. NEUQUÉN.