Por segunda vez consecutiva, Fabiola Yañez se ausentó a la cita pactada para poner su teléfono celular a disposición de la Justicia española, que iba a realizar una copia forense del aparato por orden del juez federal Julián Ercolini. Los faltazos de Yañez -ayer y hoy- hicieron caer el convenio de colaboración con el ministerio fiscal español, que dio por cerrado el procedimiento.
“La medida vuelve sin realizarse. No se presentó”, afirmaron fuentes locales, allegadas a la causa que investiga presuntos hechos de violencia del expresidente Alberto Fernández sobre la ex primera dama. “No lo llevó [al teléfono] en dos oportunidades, entonces se cerró la colaboración pedida en la rogatoria”, agregaron, en alusión a la solicitud formal enviada desde la fiscalía de Ramiro González.
La Justicia española se disponía a poner en marcha una extracción de los datos del teléfono para enviarlos al país bajo custodia, en valija diplomática. La selección de la información pertinente para la causa se iba a realizar en suelo argentino.
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Luego de faltar a la primera convocatoria, pactada para las 10 de la mañana de España de ayer, la fiscal española a cargo del procedimiento se presentó en el domicilio de Yañez en Madrid junto con un equipo especial de violencia de género. Según pudo averiguar LA NACION de fuentes cercanas a la ex primera dama, en esa visita Yañez acordó entregar su celular hoy por la mañana, pero volvió a ausentarse a la cita.
Ayer por la noche, luego del primer faltazo y la visita de la Justicia española, la ex primera dama realizó un inquietante posteo en su cuenta de Instagram: “Tengo miedo”, publicó.
Minutos más tardes, la modelo Sofía Pacchi, ex amiga de Yañez, se hizo eco del posteo con otro mensaje, también en su cuenta de Instagram, diciendo: “Yo más”.
Su declaración frente al fiscal Ramiro González se postergó en dos oportunidades y continúa pendiente.
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