Las esquirlas salpican por todas las direcciones. La bomba ya estalló y activó un campo minado de datos, de nuevas instancias, de detalles sórdidos y escabrosos. Pampita y Roberto García Moritán nadan por aguas tormentosas, a raíz de la crisis galopante que atraviesa su casamiento.

La famosa todavía no se expresó en público, ni para desmentir ni para confirmar la separación de su marido, lo que se erige en toda una señal poderosa. De esos rumores de un quiebre en la relación se acumularon pormenores fortísimos, como la descripción de varios vínculos clandestinos con otras mujeres de parte del político.

El miércoles se convirtió en una jornada tremenda, principalmente por la corroboración que ofreció Ángel de Brito, que publicó un posteo incendiario:” La separación es definitiva. Avanza el divorcio”. El hombre de LAM maneja con mucho cuidado este tipo de informaciones y que haya aseverado el inicio del trámite legal de separación es todo un indicativo.

En el medio de todo eso, Moritán habló con A la tarde y procuró esquivar todas las balas, solo atinó a exhibir que todavía lleva en su mano izquierda su alianza de boda, caso contrario a lo que comprobó ayer Carolina Ardohain al mostrar que no usa más el anillo.

Como si la aceleración de los acontecimientos fuese escasa, ahora se acaba de confirmar un dato impresionante. Karina Mazzocco reveló que Pampita y Roberto sellaron un documento oficial muy controversial: un contrato prenupcial. Sí, la modelo se habría asegurado resguardar su fortuna antes de caminar por el altar con el funcionario público.

Por Prensa Pura Digital

DIARIO DE VILLA LA ANGOSTURA Y REGIÓN DE LOS LAGOS. NEUQUÉN.