Si se tienen en cuenta los últimos gobiernos de la Argentina, la expectativa que genera el presidente Javier Milei cada vez que habla, sólo se lo puede comparar a Cristina Kirchner, Distintos, casi opuestos para sus votantes, pero envueltos en una mística nada despreciable para un político. También al igual que la ex Presidenta, cosecha elogios y críticas que se pueden definir como “contundentes”.
Una muestra más fue lo que el Presidente afirmó durante su presentación en la 79 Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), que se celebra en Nueva York. Dijo, Milei, entre otras cosas, que la ONU se ha transformado en un “leviatán de múltiples tentáculos” que impone una agenda ideológica a sus países miembros, como la llamada “Agenda 2030”, y adelantó que Argentina abandonará la “posición histórica de neutralidad” para estar a la vanguardia “de la lucha en defensa de la libertad”. “Así es como pasamos de una organización que perseguía la paz a una organización que le impone una agenda ideológica a sus miembros, sobre un sinfín de temas que hacen a la vida del hombre en sociedad”.
Milei afirmó que esa organización es “impotente en brindar soluciones a los verdaderos conflictos globales como la aberrante invasión rusa a Ucrania“, y destacó que tampoco “ha cumplido satisfactoriamente su misión de defender la soberanía territorial de sus integrantes, como sabemos los argentinos de primera mano en la relación con las Islas Malvinas“, se comunicó oficialmente.
“No soy político, soy un economista liberal, libertario, que jamás tuvo la ambición de hacer política y que fue honrado con el cargo de Presidente de la República Argentina, frente al fracaso estrepitoso de más de un siglo de políticas colectivistas que destruyeron nuestro país”, dijo Milei.
La posición del Presidente sorprendió en el recinto de la ONU porque siempre los gobiernos de la Argentina estaban centrados en el reclamo por Malvinas y, en todo caso, criticas a los países centrales.
Milei, en cambio, pisó el acelerador a fondo y se posicionó otra vez a favor de los países centrales sin descuidar criticar con dureza a la burocracia. Fue en ese sentido que calificó a la ONU como un organismo burocrático.
¿Las palabras de Milei están dirigidas a los líderes mundiales o simplemente son otro mensaje para sus votantes en la Argentina?
El Presidente sabe que la Argentina no es un país central pero también sabe que lo que dice lo coloca como un líder libertario y referente de un Estado emergente.