En el proyecto de Presupuesto de 2025 el Gobierno dejó firme la eliminación del impuesto PAIS que pagan las importaciones de bienes, así como el recorte en Bienes Personales. Sin embargo, se proyecta que la recaudación tributaria crecerá un 8%. Los tributos que compensarán esa caída en la recaudación son fundamentalmente el monotributo, el impuesto al combustible y las retenciones.

Además, la presión tributaría subiría en comparación con la de 2024 y 2023.

Monotributo: por qué aumentará la presión impositiva en 2025

Cambios en la recaudación: sube el peso del monotributo

El impuesto PAIS en los primeros ocho meses de 2024 representó más del 7% de la recaudación total, luego de la suba al 17,5% que aplicó el Gobierno al asumir y la devaluación, que llevó a que este tributo cobrara mayor relevancia.

Desde septiembre entró en vigencia el recorte de los 10 puntos que habían sumado a fines del año pasado y el Gobierno ratificó que no prorrogará el impuesto que, según la ley que le dio origen, se elimina en diciembre de este año.

Así, para 2025, el impuesto PAIS registra una caída del 100%. En el caso de Bienes Personales, a raíz del recorte de la alícuota, tendría una caída del 39,35% para el año próximo, según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal. Algo similar ocurriría con otros impuestos que en su conjunto recortarán lo recaudado en un 7,82%y cerrará el año, según el Gobierno, representando el 1,10% del PBI.

La pérdida en estos impuestos se verá más que compensado por el aumento de lo recaudado por el monotributo. En este impuesto el salto será del 133% en términos reales. Sobre el porcentaje del PBI pasará a ser el 0,09%, muy por encima del 0,04% que representó en 2024.

Le sigue en recuperación los impuestos a los combustibles, que tendrán una suba del 100% y los derechos de exportación que treparán un 57% y pasarán a representar el 1,43%/PBI en 2025. Este último punto debió ser aclarado por el Gobierno ya que suscitó críticas por parte del sector exportador al no verse ningún recorte sobre las retenciones.

El Gobierno sostuvo que la baja proyectada para 2025 responde a que la base de comparación de 2023 (vigente en 2024 por la prórroga del presupuesto) quedó baja por el adelantamiento de exportaciones, incentivadas por los regímenes diferenciales (como el dólar soja o el actual blend).

El cuarto tributo que más subirá es Ganancias (20%) que pasará a representar del 4,42% del PBI en 2024 al 5,05% el año próximo, fundamentalmente a raíz de incluir nuevamente a los trabajadores en relación de dependencia dentro del impuesto.

En quinto lugar se ubicarán los derechos de importación, que subirán 18% y pasarán de ser el 0,52% del PBI al 0,58%. Aquí incide la expectativa de que la reactivación económica aumente la demanda de las compras al exterior. En sexto lugar se ubicarían los aportes y contribuciones a la seguridad social (-15,8%) que serán saltarán 0,50 puntos porcentuales y serán el 5,56% del PBI.

En el caso del IVA, el impuesto con mayor recaudación, tendrá un aumento del 1%, pero recortará su participación sobre el PBI del 7,33% del PBI al 7,02%.

Presión tributaria

En base a estos cambios en los principales impuestos, IARAF concluyó que la presión tributaria aumentará 0,55 puntos porcentuales, pasando de ser el 22,37% del PBI en 2024 a 22,92% el año próximo.

Si bien este nivel de presión tributaria es superior a la de los últimos dos años, se ubica por debajo de los niveles registrados desde 2016 a 2022.

Sin embargo, desde IARAF agregaron que “desde el nivel proyectado”, en el promedio de los tributos se recorta la presión tributaria efectiva: “Desde este punto de vista, las proyecciones de recaudación, dado el PBI esperado, reflejan una mayoría de tributos con peso relativo inferior al promedio de años previos”.

Por Prensa Pura Digital

DIARIO DE VILLA LA ANGOSTURA Y REGIÓN DE LOS LAGOS. NEUQUÉN.