La etapa 1 del blanqueo se acerca a su fin, con cierre el 30 de septiembre. Esta es la única etapa en la que se puede ingresar efectivo. Si bien los especialistas, y en particular los contadores, plantearon en varias oportunidades la necesidad de prorrogar el vencimiento, dado que se acumularon otros trámites, existe una forma de hacerlo lo más rápido posible y sin cometer errores.
En esta etapa, en el caso del efectivo se pueden ingresar hasta u$s 100.000 y retirarlos desde octubre, o más de u$s 100.000 y dejarlos ya sea en la cuenta o en inversiones. Si se desean retirar, la alícuota es del 5%. Para los bienes, no se paga si es menos de ese monto, y se paga 5% sobre el excedente.
Dado que quedan pocos días para ingresar, en especial el efectivo, los especialistas recomiendan ordenarse. “Lo primero que debe tener en cuenta el contribuyente es hacer su planificación patrimonial, cuál es la plata que va a querer ingresar y poner en acción los próximos años porque no va a haber otro blanqueo en mucho tiempo”, explicó Elisabet Piacentini, contadora tributarista y miembro de la mesa tributaria FECOBA.
Conseguir asesoría es importante para poder conocer en detalle qué es lo más conveniente según cada contribuyente. La amplia mayoría de los contadores se encuentran en conocimiento de la normativa y pueden asesorar al cliente.
Siempre hablando del efectivo, una de las primeras cosas por hacer es abrir la Cuenta Especial para Regularización de Activos (CERA) en un banco o ALYC (donde será una cuenta comitente especial), ya sea en el que el contribuyente es cliente o en el que prefiera. La amplia mayoría de los bancos permiten que la creación de la cuenta sea online. Una vez realizada la solicitud se debe completar un formulario que pide información como ingresos mensuales, situación laboral, residencia, CUIT, entre otras.
En caso de estar en relación de dependencia, algunos bancos solicitan la fecha exacta de ingreso en esa condición laboral. Cabe aclarar que muchos bancos privados ofrecen asesoría personalizada para abrir las cuentas CERA.
“El banco no debería pedir más datos porque no están mencionados en la Ley”, aclaró Piacentini. Algunos requisitos que solicitaron los bancos generaron múltiples quejas por parte de los usuarios, mientras que los profesionales insisten que se debe realizar de todas maneras la apertura.
El trámite de apertura de cuenta no lleva más de 20 minutos en promedio y en el transcurso del día el banco enviará un mail de confirmación de apertura.
AFIP
En paralelo, el contribuyente o su contador debe realizar en la página de AFIP el trámite de adhesión al blanqueo. En él, se manifiesta la voluntad del contribuyente de adherir. Este trámite para un usuario entrenado no insume más de 15 minutos.
Para hacerlo, se debe ingresar a la página de AFIP e ir a “iniciar sesión” y completar el CUIT o CUIL y la clave fiscal. Luego debe dirigirse al apartado “Régimen de Regularización de Activos” y agregarlo. Una vez allí, se debe seleccionar la etapa correspondiente (en este caso la 1) y aparecerá la opción de “manifestación de adhesión”.
Luego, el sitio solicitará declarar si el sujeto está excluido de adherir (entre ellos, funcionarios y exfuncionarios y sus familiares). De estar excluido, el sitio presentará una tarjeta que dice que prohíbe la adhesión.
El sitio luego ofrecerá las tres opciones posibles: regularización en cuenta especial, de otros bienes con pago de impuesto en dólares y bienes con pago opcional del impuesto en pesos.
La primera opción es la posible para efectivo. Una vez completados los datos, el sitio mostrará una ventana para confirmar la presentación de la información. Allí se podrá descargar la adhesión.
Cabe aclarar que se debe presentar una declaración jurada, pero para ese trámite hay tiempo hasta el 30 de noviembre.
En caso de querer disponer de los fondos, se deberá emitir allí mismo un VEP para pagar el impuesto del 5%.
Una vez que se tenga la cuenta CERA y la adhesión, el cliente debe presentarse en el banco con los fondos. Los bancos, por normativa del Banco Central, deben aceptar todos los billetes, ya sean cara chica, gastados, arrugados, viejos, manchados, escritos y con bordes rotos.
Piacentini agregó que, en caso de hacer todo de la manera más ágil posible, el trámite no debería insumir más de tres días.