Una joven de 17 años denunció a un hombre que, según el relato que presentó en la Justicia, la citó como niñera pero después la quiso abusar sexualmente. El caso ocurrido en Rosario trascendió porque, para escapar, la mujer abrió la puerta del balcón y se colgó, lo que derivó en que los vecinos se agolparan en el lugar para intentar ayudarla a que no cayera desde la altura.

Además de exponer en sede judicial, la chica hizo un largo posteo en su cuenta de la red social X donde narró los detalles del episodio. “El día de ayer sucedió algo terrible. Cuento esto porque no quiero que otra persona lo pase y porque este pelotudo tiene que pagar”, introdujo la joven, junto a una foto del supuesto abusador. Entonces, dijo que fue a la casa del hombre a cuidar a su hija de siete años.

“Lo que me parecía raro es que él nunca se iba, siempre se quedaba en el departamento”, comentó y siguió: “El lunes me citó para cuidar a la nena, accedí y fui. No pasó absolutamente nada, pero me percaté que había llamado a alguien y le había dicho ‘ya vino Miguel Ángel, el pintor’, y que iba a tocar para ver si tenía humedad o no. Las paredes no tenían humedad”, relató la joven, que publicó una captura de pantalla de una conversación de WhatsApp con un usuario llamado “Lucas”, en la que ella había aceptado ir a cuidar a la niña el 26 de agosto pasado y lo mismo el lunes. “Luz, vení hoy, 14 horas a 17″, le pedía él en el chat, a las 08.51. A las 14.04, en un mensaje editado, ella le escribió: “Estoy afuera”. Esto fue en el barrio del Abasto, que linda con la zona del Parque Independencia.

En su testimonio, la chica siguió: “Cuando llegué, él ya estaba afuera esperándome. Cuando lo saludé me dijo: ‘La nena está durmiendo, vino cansada de la escuela’. Yo me reí y subimos al departamento. Cuando abrí la puerta y entré al monoambiente, había un bulto en la cama, era ‘la nena’. Cuando me acerqué a la cama, yo toqué a la nena y me di cuenta que eran peluches y sábanas”.

Al notificar esto, y siempre en base a sus revelaciones, ella “entró en pánico y sintió un calor en todo el cuerpo”, a la vez que su corazón comenzó a latir fuerte. “No pensé absolutamente nada, solo quería irme porque claramente algo no estaba bien. Le dije ‘por favor, no’ y este tipo se asustó. Le dije: ‘¿La nena? ¿Dónde está la nena? Me tengo que ir, abrime la puerta, me quiero ir’. Él quiso acercarse y yo manoteé el picaporte del balcón. No podía abrir, estaba asustadísima”, relató.

Pese a esto, logró destrabar la puerta y salir al exterior. “Amagué a tirarme, me subí del otro lado del balcón y quedé colgando. Quise tirarme, prefería tirarme del tercer piso antes que pasar por donde estaba él. Con una mano en la baranda y con la otra mano intentando llamar a quien sea desde mi celular, le dije: ‘¿Dónde está la nena? ¿Dónde está? ¿Qué hiciste?’. Me estaba por tirar hasta que pensé que claramente me iba a quebrar. Vi a una mujer pasar por la vereda y le grité: ‘Ayudame, ayuda por favor’”, contó la joven, quien dijo que, ante esa escena, se empezaron a congregar vecinos.

“Todos me preguntaban qué pasaba y yo no podía hablar, estaba temblando y no sabía qué hacer. Les grité: ‘La nena, la cama, había un bulto, me quiso abusar’. Y Lucas [por el hombre] me dijo: ‘Andate si querés, cualquiera lo que hacés’”, continuó la mujer, que indicó: “Pedí que alguien subiera y me salvara. Yo les decía: ‘Yo bajo, no me tiro, pero vénganme a buscar, por favor’. Una mujer muy amable pudo subir y ayudarme”.

Tras eso, la joven narró que entró en un “ataque de ansiedad” y que se encontraba muy nerviosa porque no lograba entender lo que ocurría. “El tipo subió y acomodó la cama como si fuese que no había pasado nada y que yo estaba loca. Cuando bajó, se quiso ir, escapar. Las personas no lo dejaron. Cuando me di cuenta lo que quería hacer, atiné a acercarme y decirle: ‘Te cagaste en mí, te dije que quería trabajar, ¿por qué hiciste esto?’. Y más cosas”, indicó ella, a lo que él le habría respondido “flasheás”.

Convencida de que “la sacó barata” porque logró huir y evitar el abuso, la mujer aseguró que este hombre ya tiene una denuncia precedente por este mismo delito pero que quedó libre. “Yo quiero contactar con esta mujer que pasó por lo mismo o peor”, aseguró la joven, que pidió que si hay otras víctimas se contacten con ella debido a que esta persona “tiene que pagar por lo que hizo”.

Según pudo averiguar LA NACION de fuentes judiciales, es así que hace unos años este hombre recibió una denuncia en su contra, pero el miércoles la Justicia revisó ese expediente, y constató que la víctima anterior al final no instó la acción penal y por lo tanto la causa quedó desestimada.

Este jueves, en tanto, el hombre fue citado a la Fiscalía y quedó imputado por grooming por haber contactado a su nueva denunciante por medios electrónicos con supuesta intención de atentar contra su integridad sexual. Se le dictó prohibición de acercamiento a la chica, se le secuestró el celular (aportó desbloqueo) y, en su declaración, manifestó una versión opuesta a la que ella brindó. Quedó en libertad.

La investigación, que lleva adelante la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual, sigue en curso. De momento, las autoridades intentan reconstruir si es certera la mecánica que relata la denunciante.

Respuestas

Asimismo, fue tal la conmoción que generó la publicación en X, que la joven respondió preguntas de sus seguidores y detalló que el hombre en cuestión tiene 38 años. “Es el vecino de mi mejor amiga, no sabés el terror que vive ella todos los días y el tipo sigue suelto”, le escribió una usuaria. “Decile a tu amiga que le agradezco mucho que saliera a hablar”, le comentó la denunciante, quien indicó que la niña que iba a cuidar tenía custodia compartida entre su padre (el denunciado) y su madre.

Por Prensa Pura Digital

DIARIO DE VILLA LA ANGOSTURA Y REGIÓN DE LOS LAGOS. NEUQUÉN.