En medio de la interna de Juntos por el Cambio por las candidaturas para este año electoral, el ex presidente Mauricio Macri cuestionó “lo que se llama ‘políticamente correcto’, que está lleno de mentiras” y sostuvo que en la Argentina “se necesitan voces con coraje para decir lo que se piensa sin medias tintas”.
Aunque sin nombrar a nadie, el ex mandatario nacional dio su visión de la situación política actual y del estado en el que se encuentra el país durante un audio que le envió al periodista Luis Majul para felicitarlo por el lanzamiento de su nueva radio.
“La tarea que ustedes hacen es indispensable. Es imposible pensar la democracia moderna sin periodismo, por eso mi compromiso con la libertad de prensa es total y por eso celebro la creación de nuevos espacios como este”, comenzó diciendo el ex jefe de Estado.
Para Macri, “la Argentina está herida, está lastimada, pero también está preparada para profundizar las grandes oportunidades que se abren” y celebró que “antes de fin de año este gobierno, que es el peor de la historia de la democracia de nuestro país, va a terminar”.
El ex presidente sostuvo que “se necesitan voces comprometidas”
Al respecto, confió en que la próxima gestión va a contar con “un equipo de gobierno que va a respetar la ley, va a respetar las instituciones, que va a proteger las libertades y no va a presionar a la oposición ni a los jueces ni a la prensa”.
“Se necesitan cambios muy profundos y valientes para que la Argentina encuentre el rumbo. Se necesitan voces comprometidas, sinceras, auténticas, voces con coraje para decir lo que piensan sin medias tintas, sin volver a caer en lo que se llama ‘políticamente correcto’, que está lleno de mentiras”, agregó.
Sus declaraciones llegaron apenas unos días después de la reunión de los principales dirigentes del PRO, de la que él mismo participó junto a Horacio Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal, tres referentes del espacio que ya anunciaron sus deseos de competir por la Presidencia.
El encuentro se dio el viernes pasado en la casa del ex ministro de Trabajo Jorge Triaca, en el partido bonaerense de San Isidro, con el objetivo de dar una señal de unidad e intentar destrabar la interna que tiene su principal foco de conflicto en la resolución de las candidaturas en la Ciudad de Buenos Aires.
La cumbre del partido amarillo se dio horas después de la reaparición pública de la vicepresidenta Cristina Kirchner y tras el desembarco de José Luis Espert en Juntos por el Cambio, hecho que tensa aún más la relación entre Rodríguez Larreta y Bullrich.
El presidente del PRO, Federico Angelini, fue el primero en salir e improvisó una conferencia de prensa. Allí apenas comentó que se analizó la situación crítica del país y que el próximo martes se volverán a reunir. “No se habló de candidaturas, se habló de economía”, resumió.
El conflicto en el PRO comenzó hace meses, pero se agudizó luego que el jefe de Gobierno porteño anunciara que en la ciudad de Buenos Aires se votará con el sistema de elecciones concurrentes, por lo que si el espacio no logra presentar a un candidato de unidad, corre riesgo de perder la conducción del distrito en manos de Martín Lousteau, que encabezaría la boleta por el radicalismo.