A medida que avanza la recuperación por parte de Ucrania de zonas que habían sido ocupadas por los invasores rusos, también se lleva a cabo un operativo de suma importancia: la reparación de las estaciones base dañadas y los cables de fibra óptica que dejaron a cientos de pueblos y aldeas sin Internet y, por ende, sin poder comunicarse con sus seres queridos ni el mundo exterior.
Equipos de técnicos e ingenieros locales trabajan en distintas áreas armados on chalecos antibalas y cascos en medio de los bombardeos en curso. Con tropas ucranianas como escoltas – a veces- buscan sortear las minas terrestres y los ataques desde varios frentes para devolver a miles de personas esa conexión web y móvil esencial.
“Lo primero que hacen los rusos cuando ocupan estos territorios es cortar las redes”, le dice a la revista Time Stas Prybytko, jefe de desarrollo de banda ancha móvil en el Ministerio de Transformación Digital de Ucrania. “Entonces, las personas que viven allí no saben lo que está sucediendo en Ucrania, no pueden llamar a la familia para describir la situación, no saben si sus familiares están vivos o no”.
En una investigación de la revista Time, se explica que “la batalla por el control de Internet en Ucrania muestra cómo ambas partes ven el acceso en línea como un arma crítica en una guerra del siglo XXI. El flujo constante de videos y fotos de Ucrania ha sido un componente crítico del esfuerzo de guerra, dando al mundo un asiento de primera fila para la invasión. Las medidas de Rusia para cortar el acceso a Internet y las redes móviles dejaron a los ucranianos que vivían bajo ocupación en un vacío de información que Rusia llenó con su propia propaganda. A lo largo de los combates, muchas de las pruebas de las atrocidades cometidas por las tropas rusas en las zonas ocupadas surgieron muchos meses después de que se cometieran los crímenes”.
Durante el tiempo que lleva la invasión, Rusia ha incautado o destruido más de 4.000 estaciones base pertenecientes a proveedores de telecomunicaciones ucranianos, además de más de 60.000 kilómetros de líneas de fibra óptica, según información del Servicio Especial de Comunicaciones de Ucrania. Además, destruyeron 18 antenas de transmisión que proporcionaban señales de radio y televisión.
Por eso, los trabajadores de las telecomunicaciones se han convertido en “héroes invisibles” de esta guerra. Trabajan pacientemente en medio de la destrucción, y lograron que, a pesar de los continuos cortes y bombardeos, la mayor parte del país se haya mantenido en línea, un punto clave durante esta guerra. Incluso, los territorios liberados se han restaurado a una velocidad impresionante, según analistas externos confirman a Time.
Y lo hacen a pesar del peligro, que claramente es alto. A principios de octubre, por ejemplo, un vehículo que transportaba a cuatro empleados de Ukrtelecom explotó después de pasar sobre una mina terrestre en la región de Sumy. En los ataques aéreos rusos del 10 de octubre, algunos dirigidos especialmente a edificios de telecomunicaciones, cuatro empleados del departamento de Ucrania que supervisa la infraestructura digital murieron.
Estos trabajadores han restaurado 1.232 estaciones base en áreas ocupadas por los rusos desde marzo. Y antes de que se completaran las reparaciones, se instalaron puntos WiFi improvisados donde los lugareños hacen largas filas para conectarse en línea durante 15 minutos.
“Después de que las tropas rusas invadieran Ucrania en febrero, la ocupación de las ciudades ucranianas siguió un patrón. Después de establecer el control, su primera parada solía ser las oficinas del proveedor local de servicios de Internet”, según le dijeron funcionarios ucranianos a Time. “Allí a menudo se apoderaban de las redes de telecomunicaciones a punta de pistola”.
Para evitar entregar a los rusos el control de los servicios locales de Internet y telefonía, los empleados de estos proveedores de servicios a veces destruyeron el equipo tan pronto como quedó claro que el área estaba bajo ocupación. “Algunos de estos trabajadores fueron encarcelados por las fuerzas rusas, incluidos los empleados de Ukrtelecom, uno de los principales proveedores del país”, explica este medio..
A pesar de sus esfuerzos, muchos proveedores más pequeños se vieron obligados a operar bajo control ruso, y desviaban el tráfico de Internet de sus clientes a través de una filial de Rostelcom, una empresa estatal rusa con sede en Crimea, exponiéndolos a la vigilancia y la censura del Kremlin. Para junio, aproximadamente 700 proveedores de servicios ucranianos estaban siendo controlados por las fuerzas de ocupación rusas, según dijo a Time Liliia Malon, comisionada del regulador de infraestructura y servicios digitales de Ucrania. Rusia hizo lo mismo cuando anexó Crimea en 2014.
El éxito de la operación rusa es medible, según cifras compartidas con Time por el grupo de investigación de la industria con sede en Londres Top10VPN: “Desde que comenzó la invasión a fines de febrero, la cantidad de usuarios que se conectan a Internet en Ucrania se ha reducido en al menos un 16% en todo el país. Las regiones ocupadas de Kherson, Donetsk y Luhansk han visto una reducción en las direcciones IP accesibles del 81%, 58% y 56%, respectivamente, según el análisis del grupo, y ha habido al menos 276 interrupciones de Internet en Ucrania por un total de 19.000 horas”.
Una de las razones por las que el daño no fue tan significativo es la complicada infraestructura de telecomunicaciones de Ucrania, que se basa en una red de cientos de proveedores independientes de telefonía móvil e Internet. Este tipo de naturaleza descentralizada impidió que las fuerzas rusas puedan ir a una oficina y derribar toda una región.
El mayor desafío para quienes coordinan estos grupos de trabajadores es garantizar la seguridad física de los equipos de reparación. Además de la amenaza de ser bombardeados, “la minería de estaciones base es un gran problema”, dice Prybytko, porque los rusos han usado minas terrestres “para evitar una restauración más rápida del servicio”.
Por eso, las cuadrillas deben esperar a que el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania despeje el área antes de poder acceder a ella. Se evalúa el daño y se determina qué equipo podría ser necesario. Además, muchas áreas liberadas recientemente no tienen electricidad, por lo que se requieren generadores diesel manuales.
“Mientras continúa la guerra, los funcionarios ucranianos y los proveedores de Internet dicen que ya ganaron en el frente digital”, afirma Time. “Los operadores rivales han trabajado juntos para brindar cobertura de roaming a los usuarios ucranianos, quienes pueden saltar de una red a otra si la cobertura de su proveedor se cae. También han colaborado para reparar las estaciones base bombardeadas de los demás. Desde el comienzo de la guerra, el operador móvil ucraniano Lifecell ha realizado más de 55.000 visitas de personal para reparar equipos y el 92% de sus redes ahora están operativas. Ukrtelecom tiene el 87% de sus oficinas regionales nuevamente en línea”.